martes, 29 de mayo de 2007

Vanguardias

CUARTO NIVEL

Futurismo
Dadaísmo
Surrealismo
Creacionismo
Ultraismo

Vanguardia: avanzada de un grupo o movimiento ideológico, político, literario, artístico etc., las características del vanguardismo son siempre el hermetismo, la experimentación técnica y formal, y el afan de originalidad. (Diccionario enciclopédico Océano)
El término vanguardias surge en Francia durante los años de la Primera Guerra [1914-1917]. Su origen está precisamente en el vocablo francés avant-garde, término de origen militar y político, que venía a reflejar el espíritu de lucha, de combate y de confrontación que el nuevo arte del siglo oponía frente al llamado arte decimonónico o académico.
Desde el principio, el arte vanguardista adquiere una impronta provocadora contra lo antiguo, lo naturalista o lo que se relacionara con el arte burgués. No será causalidad que todas las primeras manifestaciones de estos vanguardismos estén repletos de actos y gestos de impacto social, como expresión de un profundo rechazo a la llamada cultura burguesa. La Primera Guerra, como expresión del afán imperialista y del profundo fracaso de esa burguesía por conseguir la paz, será el período en que, junto a actitudes diversas de rechazo a la guerra, afloren todas estas manifestaciones artísticas extraordinarias con una versatilidad y agilidad desconocidas hasta entonces. Los llamados ismos se sucederán uno tras otro.
No es ninguna casualidad que el surgimiento de los vanguardismos artísticos y literarios esté relacionado íntimamente con el periodo de mayor intensidad social, ideológica, en definitiva histórica, del siglo XX: el periodo que va desde la Primera guerra del 14 al inicio de la Segunda en 1939. En esos 15 ó 20 años cuajan las experiencias del nuevo arte: unas pasarán rápidamente, otras quedarán incorporadas al arte para siempre, pero la revolución de las formas y de los contenidos se producirá, sin duda, a partir de aquellas vanguardias de los años 20.

Los vanguardismos despuntan inmediatamente antes o durante la Primera Guerra, llegan a su apogeo durante la década de los años 20, entran en crisis a partir de 1929 y desaparecerán en la década de los 30.
En esos años, los artistas vanguardistas se han enfrentado al mundo de ideas proveniente del pensamiento burgués: unos derivarán hacia el antiburguesismo de tipo fascista, como es el caso del futurismo italiano de Marinetti; otros volcarán su rebeldía en el movimiento proletario izquierdista. De esta forma, los dos grandes movimientos que marcarán el siglo XX, el fascismo-nazismo y el comunismo, serán expuestos y cantados en sus iniciales años de poder a través de una estética y unas formas vanguardistas. El caso más ilustrativo es el del surrealismo francés y su apuesta por la revolución comunista. Posteriormente serán ellos mismos perseguidos y prohibidos por los propios aparatos culturales de estado, como ocurrió en la URSS estalinista a partir de 1923 y en la Alemania nazi de 1933. En el primer caso, los poetas futuristas serán criticados a partir de la nueva estética realista y populista tras la guerra civil revolucionaria. En el segundo caso, los jerarcas nazis secuestrarán la pintura vanguardista que había caracterizado el renacer cultural alemán, considerada a partir de entonces como "arte degenerado".
La gran confrontación ideológica y militar de la década de los cuarenta, la Segunda Guerra, acabará con los vanguardismos. Sus restos o serán enterrados o derivarán en el arte moderno cuya expresión más genuina será el arte de Estados Unidos a partir de los años 40. El trabajo de fundamentar un nuevo concepto de arte y de literatura ya estaba realizado.


FUTURISMO: el frenesí de la vida moderna

Movimiento literario y artístico surgido en Italia en el primer decenio del siglo XX. Nació con un manifiesto, y varió y fijó sus propios enunciados en una serie de manifiestos. El 20 de febrero de 1909
F.T. Marinetti publicó en «Le Figaro» de París un primer Manifiesto en el que proclamó como formas de expresión del futurismo la agresividad, la temeridad, el salto mortal, la bofetada, el puñetazo.
En 1912, el mismo Marinetti, con el
Manifiesto técnico de la literatura futurista, apuntó como medio específico de expresión literaria las «palabras en libertad», que eran capaces de traducir, por analogía y sugestión, los mecanismos psíquicos y el frenesí de la vida moderna. Esto comportaba la abolición de la sintaxis, de la puntuación, de las partes calificativas del discurso (adjetivos, adverbios). Las nuevas teorías se aplicaron también a la pintura (1910: Primer y segundo manifiesto de la pintura futurista, firmados por Balla, Boccioni, Carrá y Russolo), a la música (1910: Manifiesto de los músicos futuristas, firmado por Pratella), a la escultura (1912: Manifiesto de Boccioni, en el que se afirma que la escultura debe convertir el infinito plástico aparente y el infinito plástico interior), al teatro (1915: Manifiesto del teatro futurista sintético, firmado por Marinetti y Settimelli, y Manifiesto de la escenografía futurista, firmado por Prampolini; el primero recomendaba 2 sorprender al público con cualquier medio, p. ej. con la 1 concisión, reduciendo las escenas al tiempo fulminante ( de pocos segundos) e incluso a otras formas artísticas todavía por nacer, pero destinadas a nacer en el futuro.
Esta gran cantidad de programas revela una exasperada proyección hacia el futuro; y si por un lado expresa la voluntad de romper con la tradición, por el otro demuestra una cierta incapacidad de realizarse en formas menos hipotéticas y más actuales. Uno de los aspectos más llamativos del futurismo es, en suma, lo veleidoso, que se enmascara de triunfalismo para rechazar el mito de la derrota propio de cierto romanticismo y del decadentismo. Los fu turistas cultivan, por el contrario, el mito de la victoria: victorias tal vez ficticias, coronadas no por una gloria aristocrática y solitaria (como en D'Annunzio), sino por el escándalo en los cafés, en la calle, en las salas de conferencias.
De todos modos el futurismo fue, buena o mala, una escuela de polémica y de moral; y si usó con eficacia la técnica publicitaria, admitiéndola de golpe en la expresión artística, lo hizo con una finalidad básicamente pedagógica. Pero ello no impidió a los futuristas transformar, con el tiempo, los temas iniciales de la máquina, la velocidad, la técnica en exaltación de la violencia, del imperialismo, de la guerra, «higiene del mundo», y, por lo menos con Marinetti, del fascismo.

Primer Manifiesto del Futurismo
1909
(Fragmento)
1. Nosotros queremos cantar el amor al Peligro el hábito, de la energía y de la temeridad
2. El valor, la audacia, la rebelión serán elementos esenciales de nuestra poesía.
3. Hasta hoy, la literatura exaltó la inmovilidad pensativa, el éxtasis y el sueño. Nosotros queremos exaltar el movimiento agresivo, el insomnio febril, el paso ligero, el salto mortal, la bofetada y el puñetazo.
4. Nosotros afirmamos que la magnificiencia del mundo se ha enriquecido con una belleza nueva: la belleza de la velocidad.. Un automóvil de carreras con su capó adornado de gruesos tubos semejantes a serpientes de aliento explosivo..., un automóvil rugiente parece correr sobre la metralla, es más bello que la Victoria de Samotracia.
5. Nosotros queremos cantar al hombre que sujeta el volante, cuya asta ideal atraviesa la Tierra, ella también’ lanzada a la carrera en el circuito de su órbita.
6. Es necesario que el poeta se prodigue con ardor, con lujo y con magnificencia para aumentar el entusiástico fervor de los elementos primordiales.
7 Ya no hay belleza si no es en la lucha. Ninguna obra que no tenga un carácter agresivo puede ser una obra de arte. La poesía debe concebirse como un violento asalto contra otra las fuerzas desconocidas, para obligarlas a arrodillarse ante el hombre.
8. ¡Nos hallamos sobre el último promontorio de los siglos!... ¿Por qué deberíamos mirar a nuestras espaldas, si queremos echar abajo las misteriosas puertas de lo Imposible? El Tiempo y el Espacio murieron Ayer. Nosotros ya vivimos en lo absoluto, pues hemos creado ya la eterna velocidad omnipresente.
9. Nosotros queremos glorificar la guerra —única higiene del mundo—, el militarismo, el patriotismo, el gesto destructor dé los libertarios, las hermosas ideas por las que se muere y el desprecio por la mujer.
10. Nosotros queremos destruir los museos, las bibliotecas, las academias de todo tipo, y combatir contra el moralismo, el feminismo y toda cobardía oportunista o utilitaria.
11. Nosotros cantaremos a las grandes muchedumbres agitadas por el trabajo, por el placer o la revuelta; cantaremos las marchas multicolores y polifónicas de las revoluciones en las capitales modernas; cantaremos el vibrante fervor nocturno de los arsenales y de los astilleros incendiados por violentas lunas eléctricas; las estaciones glotonas, devoradoras de serpientes humeantes; las fábricas colgadas de las nubes por los retorcidos hilos de sus humos; los puentes semejantes a gimnastas gigantes que saltan los ríos, relampagueantes al sol ton un brillo de cuchillos; los vapores aventureros que olfatean el horizonte, las locomotoras de ancho pecho que piafan en los raíles como enormes caballos de acero embridados con tubos, y el vuelo deslizante del aeroplanos, cuya hélice ondea al viento corno una bandera y parece aplaudir como una muchedumbre entusiasta.

CANCIÓN DEL AUTOMÓVIL
POR MARINETTI
(Fragmento)

¡Dios vehemente de una raza de acero,
automóvil ebrio de espacio,
que piafas de angustia, con el freno en los dientes estridentes!
¡Oh formidable monstruo japonés de ojos de fragua,
nutrido de llamas y aceites minerales,
hambriento de horizontes y presas siderales
tu corazón se expande en su taf-taf diabólico
y tus recios neumáticos se hinchen para las danzas
que bailen por las blancas carreteras del mundo.
Suelto, por fin, tus bridas metálicas.., ¡Te lanzas
con embriaguez el Infinito liberador!


DADAISMO... Desorden y bohemia
El movimiento Dada surgió a la vez en Suiza y Estados Unidos en 1916. Desde Zurich se expandió hacia Alemania y hacia Francia. En París es ya el movimiento de moda en 1923. El movimiento Dada tiene la particularidad de no ser un movimiento de rebeldía contra otra escuela anterior, sino que se funda en un cuestionamiento de todo el marco conceptual del arte y de la literatura de antes de la Primera Guerra.
El grupo de Zurich
Suiza, a partir del estallido de la guerra en 1914, se convierte en un centro de refugiados pacifistas de toda Europa. Allí se encontraron todos los disidentes de otras escuelas previas, tales como el expresionismo alemán, el futurismo italiano o el cubismo francés. En 1916, en Zurich, un grupo de artistas instalaron en una cervecería un pequeño cabaret, al que bautizaron como "Cabaret Voltaire". Allí se reunieron el filósofo Hugo Ball, el poeta Tristan Tzara, el pintor marcel Janco, ambos refugiados rumanos, y el pintor alsaciano Jeans (Hans) Arp. A partir de ese encuentro comenzaron una serie de actividades en el cabaret así como editaron la revista que llevaría el nombre de "Dada"
Tristan Tzara pronto se convirtió en el promotor y principal exponente del movimiento Dada. Entre él y Hugo Ball dieron sustancia a la teoría dadaísta.
El origen del término Dada es confuso y controvertido. De acuerdo con la versión de Tzara y Ball, la palabra surge de la casualidad: abriendo las páginas de un diccionario con la ayuda de un cuchillo, el primer término señalado fue ese: dada. De acuerdo con otras versiones, fueron los camareros del Café Terrasse, lugar donde se solían encontrar estos artistas centroeuropeos, quienes identificaron primeramente al grupo como dada: para esos camareros, las lenguas habladas por aquellos emigrados eran incomprensibles, salvo la sílaba "da-da" ("sí, sí", en ruso y otras lenguas)
En pocos meses los espectáculos del café Voltaire fueron famosos en la ciudad Suiza. El espectáculo dadaísta había nacido, cargado de provocación, tendencia agresiva, propuestas ilógicas y absurdas.
En 1917 Francis Picabia, un pintor francés, refugiado también en Suiza entra en contacto con Tzara. Ambos darán sentido al Manifiesto Dada de 1918, posiblemente el documento más importante del movimiento dadaísta de Zurich. Tras el fin de la guerra, el dadaismo cautiva a los artistas vanguardistas de París, produciéndose un resurgimiento del mismo. El Zurich dada, con la diáspora de sus refugiados, se había acabado.

El grupo de Berlin
Tras la guerra, Alemania entra en una crítica situación. Tras la revolución bolchevique, el partido Espartaquista alemán -la izquierda socialista- ensaya también la revolución en Alemania. En toda esa agitación social un grupo de artistas van a incorporarse a las tesis izquierdistas: será el Movimiento dadaista.
Procedente del grupo de Zurich, Richard Huelsenbeck, trae a Berlin el espíritu dadaista, pero mucho más radical contra las anteriores escuelas vanguardistas (futurismo, cubismo). Junto con el poeta Raoul Hausman promueve declaraciones y manifiestos a partir del "Dada Club". Junto a los anteriores destacarán el pintor Georg Grosz, agudo crítico del militarismo y del capitalismo alemán de aquellos años, y los hermanos Herfelde, uno famoso divulgador de la técnica artística del fotomontaje, otro indispensable editor de las obras dadaistas de aquellos años.
El movimiento dada berlinés pasará a la historia por la incorporación de las nuevas técnicas artísticas de difusión de ideas entre las masas, principalmente el fotomontaje. La constitución de la República de Weimar en 1919 marca el fin de los proyectos políticos dadaistas y la resituación de este grupo en los marcos artísticos.

MANIFIESTOS DADA
TRISTAN TZARA
XIII
DADA es un microbio virgen Dadá está contra la carestía de la vida Dadá sociedad anónima para la explotación de las ideas Dadá tiene 391 actitudes y colores diferentes según el sexo del presidente Se transforma -afirma- dice al mismo tiempo lo contrario -sin importancia- grita -pesca con caña. dadá es el camaleón del cambio rápido e interesado. dadá está en contra del futuro. dadá está muerto. dadá es idiota. Viva dadá. dadá no es una escuela literaria, aúlla.
XIV
Maquillar la vida en el binóculo -frazada de caricias- panoplia para mariposas, - he ahí la vida de las camareras de la vida. Acostarse en una navaja de afeitar y sobre pulgas en celo - viajar en barómetro - mear como un cartucho - cometer errores, ser idiotas, ducharse con minutos santos - ser golpeados, ser siempre el último - gritar lo contrario de lo que dice el otro - ser la sala de redacción y de baños de dios que cada día se da un baño en nosotros en compañía del pocero, - he ahí la vida de las camareras de los dadaístas. Ser inteligente - respetar a todo el mundo - morir en el campo de honor- suscribirse a la Deida Exterior - votar por Fulano - el respeto por la naturaleza y la pintura - aullar en las manifestaciones dadá, - he ahí la vida de las camareras de los hombres.
De: Siete manifiestos DADA

SURREALISMO... el mundo del Subconsciente y lo Onírico
El Surrealismo puede dar sentido por sí solo al movimiento vanguardista. La capacidad imaginativa y la sugerencia de sus construcciones mentales significaron, sin duda, una verdadera revolución en el arte posterior a la Primera Guerra.
Aunque se haya dicho muchas veces que el Surrealismo viene directamente del Dadaismo es importante destacar los orígenes autónomos y propios del primero. Lo cual no quita que tengan entre sí líneas de contacto y reflexiones comunes. Pero si el dadá es un arte que propugna destruir, provocar el caos y aniquilar, el Surrealismo construye de veras una concepción del arte y de la vida.
Freud ejerce una influencia decisiva en el movimiento. Sus teorías acerca del mundo autónomo de los sueños, de la capacidad automática de la psiquis, del profundo y oscuro mundo interior de la mente -el subconsciente o inconsciente- aparecen como reveladoras de una nueva naturaleza del arte humano. Breton comienza a estudiar al psicoanalista vienés ya en 1916 -tres años antes de que se conocieran él y Tristan Tzara- y desarrollará un amplio caudal de conocimientos sobre dichas teorías.
Consecuencia de aquel conocimiento y del encuentro de varios artistas será el nacimiento de la revista Littérature fundada por André Breton, Louis Aragon y Philippe Soupault, nacida como consecuencia de la crisis del Dadá. Igualmente, en 1919 Breton y Soupault publican la que puede ser la primera obra surrealista: Champs magnetiques. Pero será 1924 el año decisivo: en ese año nacen las revistas Surréalisme y Révolution surréaliste y Breton redacta el
Primer Manifiesto del Surrealismo. Ya para entonces se les han añadido nombres como Artaud, Éluard, Péret y otros.
El concepto surrealismo ya había sido citado por Apollinaire. Sin embargo, Breton aporta un nuevo contenido y una nueva significación.
A partir de 1925 el movimiento se expande y politiza. Se publican cartas-denuncias dirigidas al papa, al dalai lama, contra la guerra, a favor de libertad para los delincuentes y para los locos. Su inclinación izquierdista no es óbice para sufrir la desconfianza del comunismo estalinista. La voluntad de los artistas surrealistas de militar en el comunismo se encuentra con la férrea burocracia del dogmatismo del partido francés (PCF). Ello no impide que el "Papa Breton" redacte su
Segundo Manifiesto del Surrealismo en diciembre de 1929, donde criitcará a aquellos surrealistas "puros", que no han apoyado la revolución marxista. Como consecuencia de aquella batalla dialéctica de varios años, con crisis en el grupo y cambios de posicionamientos, Breton, Éluard y Crével serán expulsados en 1933 del PCF. Quedan así dos tendencias surrealistas: una, identificada con el partido comunista francés, y otra, encabezada por Breton que se agrupa en torno a una tendencia de tipo trotskista.
Con la segunda Guerra Mundial el movimiento llega a América. Breton, exiliado en los Estados Unidos, funda allí la revista V.V.V., conoce a Trotski en México y propicia y apoya el efecto surrealista por todos esos países.
A su regreso a Europa en 1945 insiste en difundir el movimiento surrealista. Pero ya Francia, y Europa, han entrado en la onda del existencialismo y del arte comprometido desde otros presupuestos. Son Sartre y Camus los nuevos creadores de opinión literaria. Sin embargo, Breton, respetado y elogiado, lleva su actitud de denuncia social hasta rebelarse contra la guerra de Argelia (1958).
Por lo mismo debemos indicar, muy mala fe discutirnos el derecho a emplear la palabra SURREALISMO, en el sentido particular que nosotros le damos, ya que nadie puede dudar de que esta palabra no tuvo fortuna antes de que nosotros nos sirviéramos de ella. Voy a definirla, de una vez para siempre: SURREALISMO: sustantivo masculino. Automatismo psíquico puro por cuyo medio se intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral.

Primer Manifiesto del Surrealismo
André Breton
El caso es que una noche, antes de caer dormido, percibí netamente articulada hasta el punto de que resultaba imposible cambiar ni una sola palabra, pero ajena al sonido de la voz, de cualquier voz, una frase harto rara que llegaba hasta mí sin llevar en sí el menor rastro de aquellos acontecimientos de que, según las revelaciones de la conciencia, en aquel entonces me ocupaba, y la frase me pareció muy insistente, era una frase que casi me atrevería a decir estaba pegada al cristal. Grabé rápidamente la frase en mi conciencia, y, cuando me disponía a pasar a otro asunto, el carácter orgánico de la frase retuvo mi atención.
Verdaderamente, la frase me había dejado atónito; desgraciadamente no la he conservado en la memoria, era algo así como «Hay un hombre a quien la ventana ha partido por la mitad», pero no había manera de interpretarla erróneamente, ya que iba acompañada de una débil representación visual de un hombre que caminaba partido por la mitad del cuerpo aproximadamente por una ventana perpendicular al eje de aquél.
Sin duda se trataba de la consecuencia del simple acto de enderezar en el espacio la imagen de un hombre asomado a la ventana. Pero debido a que la ventana había acompañado al desplazamiento del hombre comprendí que me hallaba ante una imagen de un tipo muy raro, y tuve rápidamente la idea de incorporarla al acervo de mi material de construcciones poéticas.
No hubiera concedido tal importancia a esta frase si no hubiera dado lugar a una sucesión casi ininterrumpida de frases que me dejaron poco menos sorprendido que la primera, y, que me produjeron un sentimiento de gratitud tan grande que el dominio que, hasta aquel instante, había conseguido sobre mí mismo me pareció ilusorio, y comencé a preocuparme únicamente de poner fin a la interminable lucha que se desarrollaba en mi interior.
En aquel entonces, todavía estaba muy interesado en Freud, y conocía sus métodos de examen que había tenido ocasión de practicar con enfermos durante la guerra, por lo que decidí obtener de mí mismo lo que se procura obtener de aquéllos, es decir, un monólogo lo más rápido posible, sobre el que el espíritu crítico del paciente no formule juicio alguno, que, en consecuencia, quede libre de toda reticencia, y que sea, en lo posible, equivalente a pensar en voz alta. Me pareció entonces, y sigue pareciéndome ahora —la manera en que me llegó la frase del hombre cortado en dos lo demuestra—, que la velocidad del pensamiento no es superior a la de la palabra, y que no siempre gana a la de la palabra, ni siquiera a la de la pluma en movimiento.
Basándonos en esta premisa, Philippe Soupault, a quien había comunicado las primeras conclusiones que había llegado, y yo nos dedicamos a emborronar papel, con loable desprecio hacia los resultados literarios que de tal actividad pudieran surgir. La facilidad en la realización material de la tarea hizo todo lo demás.
Al término del primer día de trabajo, pudimos leernos recíprocamente unas cincuenta páginas escritas del modo antes dicho, y comenzamos a comparar los resultados. En conjunto, lo escrito por Soupault y por mí tenia grandes analogías, se advertían los mismos vicios de construcción y errores de la misma naturaleza, pero, por otra parte, también había en aquellas páginas la ilusión de una fecundidad extraordinaria, mucha emoción, un considerable conjunto de imágenes de una calidad que no hubiésemos sido capaces de conseguir, ni siquiera una sola, escribiendo lentamente, unos rasgos de pintoresquismo especialísimo y, aquí y allá, alguna frase de gran comicidad. Las únicas diferencias que se advertían en nuestros textos me parecieron derivar esencialmente de nuestros, respectivos temperamentos, el de Soupault menos estático que el mío y, si se me permite una ligera crítica, también derivaban de que Soupault cometió el error de colocar en lo alto de algunas páginas, sin duda con ánimo de inducir a error, ciertas palabras, a modo de titulo.
Por otra parte, y a fin de hacer plena justicia a Soupault, debo decir que se negó con todas sus fuerzas, a efectuar la menor modificación, la menor corrección, en los párrafos que me parecieron mal pergeñados. Y en este punto llevaba razón. Ello es así por cuanto resulta muy difícil apreciar en su justo valor los diversos elementos presentes, e incluso podemos decir que es imposible apreciarlos en la primer lectura. En apariencia, estos elementos son para el sujeto que escribe, tan extraños como para cualquier otra persona y el que lo e cribe recela de ellos, como es natural. Poéticamente hablando, tales elementos destacan ante todo por su alto grado de absurdo inmediato y este absurdo, una vez examinado con mayor detención, tiene la característica de conducir a cuanto hay de admisible y legítimo en nuestro mundo, a la divulgación de cierto número de propiedades, de hechos que, en resumen, no son menos objetivos que otros muchos.
En homenaje a Guillermo Apollinaire quien había muerto hacía poco, y quien en muchos casos nos parecía haber obedecido a impulsos del género antes dicho, sin abandonar por ello ciertos mediocres recursos literarios, Soupault y yo dimos el nombre de SURREALISMO al nuevo modo de expresión que teníamos a nuestro alcance y que deseábamos comunicar lo antes posible, para su propio beneficio, a todos nuestros amigos. Creo que en nuestros días no es preciso someter a nuevo examen esta denominación, y que la acepción en que la empleamos ha prevalecido por lo, general, sobre la acepción de Apollinaire. Con mayor justicia todavía, hubiéramos podido apropiarnos del termino SUPERNATURALISMO empleado por Gérard de Nerval en la dedicatoria de Muchachas de fuego. Efectivamente, parece que Nerval conocía a maravilla el espíritu de nuestra doctrina en tanto que Apollinaire conocía tan solo la letra todavía imperfecta, del surrealismo y fue incapaz de dar de él una explicación teórica duradera.
André Breton, Primer Manifiesto del Surrealismo (1924)

MANIFIESTO DEL SEÑOR ANTIFILÓSOFO
...sin la búsqueda de yo te adoro
que es un boxeador francés
valores marítimos irregulares como
la depresión de Dadá en la sangre del
bicéfalo
resbalo entre la muerte y los fosfatos
indecisos que raspan un poco el cerebro
común de los poetas dadaístas
afortunadamente
pues
oro
mina
las tarifas y la vida cara me han decidido a
abandonar las D
no es cierto que los falsos dadás me
las hayan quitado ya que
el reembolso comenzará en cuanto
es como para llorar la nada que se llama
nada
y he barrido la enfermedad en la aduana
yo caparazón y paraguas del cerebro
de mediodía a las dos de abono
supersticioso desencadenando los engranajes
del ballet espermatozoico que hallarán
ustedes en ensayo general en todos
los corazones de individuos sospechosos
yo les comeré un poco los dedos de ustedes
yo les pago la renovación del abono del
amor en celuloide que rechina como
puertas de metal
Y ustedes son unos idiotas
yo volveré una vez como su
orina renaciente a la joíe de viv:re el
viento partero
y establezco un pensionado de mantenedores
de poetas
y vengo una vez más para comenzar
de nuevo
y son ustedes unos idiotas
y la llave del selfcleptómano no
funciona más que con aceite crepuscular
en cada nudo de cada máquina
está la nariz del recién nacido
y todos somos idiotas
y muy sospechosos de una nueva forma
de inteligencia y de una nueva lógica
a la manera de nosotros mismos
que no es Dadá de manera alguna
y ustedes se de dejan llevar por el
Aaísmo
y todos ustedes son idiotas
cataplasmas
en alcohol de sueño purificado
vendajes
idiotas
vírgenes

CREACIONISMO... Creando mundos nuevos
En 1918 el poeta chileno Vicente Huidobro llega a España tras su estancia en París. A partir de su actividad y capacidad de influencia sobre un pequeño grupo de artistas partícipes de tertulias vanguardistas el movimiento se va a conectar con los aires europeos que circulaban por París. La influencia de Huidobro junto a la actividad de Ramón Gómez de la Serna marcarán el nacimiento de las jóvenes generaciones poéticas que pretenden romper con el arte anterior a la Guerra del 14. Ello no supone, ni mucho menos, despreciar el papel renovador de otras figuras como Juan Ramón Jiménez o José Ortega y Gasset.
De Huidobro surge el Creacionismo. A través de ese término se quiere dejar patente que la obra literaria es totalmente autónoma del mundo. El poeta debe dejar ya de cantar a la naturaleza; lo que tiene que hacer es imitar a la naturaleza, eliminar todo lo descriptivo o anecdótico. Hay que "hacer un poema como la naturaleza hace un árbol". Junto a Huidobro hay que destacar a Juan Larrea y Gerardo Diego como fundadores del Creacionismo.

MI IDEA SOBRE EL CREACIONISMO
VICENTE HUIDOBRO
El creacionismo no es una escuela que yo haya querido imponer a alguien; el creacionismo es una teoría estética general que empecé a elaborar hacia 1912, y cuyos tanteos y primeros pasos los hallaréis en mis libros y artículos escritos mucho antes de mi primer viaje a París.
En el número 5 de la revista chilena Musa Joven, yo decía:
El reinado de la literatura terminó. El siglo veinte verá nacer el reinado de la poesía en el verdadero sentido de la palabra, es decir, en el de creación, como la llamaron los griegos,aunque jamás lograron realizar su definición.
Más tarde, hacia 1913 o 1914, yo repetía casi igual cosa en una pequeña entrevista aparecida en la revista Ideales, entrevista que encabezaba mis poemas. También en mi libro Pasando y pasando, aparecido en diciembre de 1913, digo, en la página 270, que lo único que debe interesar a los poetas es el "acto de la creación", y oponía a cada instante este acto de creación a los comentarios y a la poesía alrededor de. La cosa creada contra la cosa cantada.
En mi poema Adán, que escribí durante las vacaciones de 1914 y que fue publicado en 1916, encontraréis estas frases de Emerson en el Prefacio, donde se habla de la constitución del poema:
Un pensamiento tan vivo que, como el espíritu de una planta o de un animal, tiene una arquitectura propia, adorna la naturaleza con una cosa nueva.
Pero fue en el Ateneo de Buenos Aires, en una conferencia que di en junio de 1916, donde expuso plenamente la teoría. Fue allí donde se me bautizó como creacionista por haber dicho en mi conferencia que la primera condición del poeta es crear; la segunda, crear, y la tercera, crear. Recuerdo que el profesor argentino José Ingenieros, que era uno de los asistentes, me dijo durante la comida a que me invitó con algunos amigos después de la conferencia: "Su sueño de una poesía inventada en cada una de sus partes por los poetas me parece irrealizable, aunque usted lo haya expuesto en forma muy clara e incluso muy científica."
Casi la misma opinión la tienen otros filósofos en Alemania y dondequiera yo haya explicado las mismas teorías. "Es hermoso, pero irrealizable."

¿Y por qué habrá de ser irrealizable?
Respondo ahora con las mismas frases con que acabé mi conferencia dada ante el grupo de Estudios Filosóficos y Científicos del doctor Allendy, en París, en enero de 1922:
Si el hombre ha sometido para sí a los tres reinos de la naturaleza, el reino mineral, el vegetal y el animal, ¿por qué razón no podrá agregar a los reinos del universo su propio reino, el reino de sus creaciones?
El hombre ya ha inventado toda una fauna nueva que anda, vuela, nada, y llena la tierra, el espacio y los mares con sus galopes desenfrenados, con sus gritos y sus gemidos.
Lo realizado en la mecánica también se ha hecho en la poesía. Os diré qué entiendo por poema creado. Es un poema en el que cada parte constitutiva, y todo el conjunto, muestra un hecho nuevo, independiente del mundo externo, desligado de cualquiera otra realidad que no sea la propia, pues toma su puesto en el mundo como un fenómeno singular, aparte y distinto de los demás fenómenos. Dicho poema es algo que no puede existir sino en la cabeza del poeta. Y no es hermoso porque recuerde algo, no es hermoso porque nos recuerde cosas vistas, a su vez hermosas, ni porque des criba hermosas cosas que podamos llegar a ver. Es hermoso en si y no admite términos de comparación. Y tampoco puede concebírselo fuera del libro.
Nada se le parece en el mundo externo; hace real lo que no existe, es decir, se hace realidad a sí mismo. Crea lo maravilloso y le da vida propia. Crea situaciones extraordinarias que jamás podrán existir en el mundo objetivo, por lo que habrán de existir en el poema para que existan en alguna parte.
Cuando escribo: "El pájaro anida en el arco iris", os presento un hecho nuevo, algo que jamás habéis visto, que jamás veréis, y que sin embargo os gustaría mucho ver.
Un poeta debe decir aquellas cosas que nunca se dirían sin él.

Los poemas creados adquieren proporciones cosmogónicas; os dan a cada instante el verdadero sublime, este sublime del que los textos nos presentan ejemplos tan poco convincentes. Y no se trata del sublime excitante y grandioso, sino de un sublime sin pretensión, sin terror, que no desea agobiar ni aplastar al lector: un sublime de bolsillo.

El poema creacionista se compone de imágenes creadas, de situaciones creadas, de conceptos creados; no escatima ningún elemento de la poesía tradicional, salvo que en él dichos elementos son íntegramente inventados, sin preocuparse, en absoluto de la realidad ni de la veracidad anteriores al acto de realización.
Vicente Huidobro, Mi Idea sobre el Creacionismo. (extracto)

EL ULTRAISMO
El vocablo calificador de una tendencia literaria no existía. No había por qué buscarlo en el Diccionario de la Academia. Tampoco relacionarlo con el plus ultra de Carlos V y de las naves colombinas. Utraísmo era sencillamente uno de los muchos neologismos que yo esparcía a voleo en mis escritos de adolescente. Cansinos-Asséns se fijó en él, acertó a aislarlo, a darle relieve. En torno al autor de El pobre baby (una de sus narraciones poemáticas más felices) se agrupaban entonces algunos de los escritores movidos por un afán ayor de novedad -no digo los mejores-. Su amable entusiasmo, su benevolencia con lo nuev o hacían afluir a su tertulia nocturna (alternando on la de Ramón Gómez de la Serna en Pombo), e la madrugada más bien, en un café céntrico de Madrid, entre hampones de la bohemia y galeotes del periodismo, a algunos poetas jóvenes. Quizá en aquellas reuniones -yo no era asiduo- comenzó a cundir la voz ultraísmo. El Ultraísmo tiene bastante en común con el Creacionismo y, desde luego, contó con una gran aceptación entre las minorías literarias: participan en su gestación personas como Cansinos-Asséns, Eugenio Montes, Isaac del Vando, Adriano del Valle, Rafael Lasso de la Vega o Jorge Luis Borges, en aquel momento presente en España. Asimismo serán numerosas las revistas que difunden sus principios poéticos: Grecia, Cervantes, Ultra, Plural, Alfar, etc. Prescisamente en la revista Grecia apareció el primer manifiesto en 1919, donde ya se vislumbraban las relaciones de esta tendencia con el futurismo italiano y el dadaísmo. Su corta vida no impidió que se exportara a Hispanoamérica, donde tuvo una buena acogida por el ya citado Borges además de González lanuza, Piñero y Ortelli, entre otros. En cuanto al término Ultraísmo, Guillermo de Torre apunta a su autoría y al papel de Cansinos-Asséns.

Rasgos del Ultraísmo
· El poema ultraísta deja notar las influencias del cubismo, del futurismo y del dadaísmo.
· Imágenes y metáforas chocantes, ilógicas, donde destacan el mundo del cine, del deporte, del adelanto técnico: "Los motores suenan mejor que endecasílabos" (Guillermo de Torre).
· Eliminación de la rima
· Tendencia a establecer una disposición tipográfica nueva de las palabras del poema, pretendiendo de ese modo hacer ver una fusión de la plástica y la poesía.
· Neologismos, tecnicismos y palabras esdrújulas.


Otros elementos en la conformación de la Literatura
y su visión iconoclasta a lo largo del siglo XX


DIEZ MANDAMIENTOS PARA ESCRIBIR CON ESTILO
FRIEDRICH NIETZSCHE
1. Lo que importa más es la vida: el estilo debe vivir.
2. El estilo debe ser apropiado a tu persona, en función de una persona determinada a la que quieres comunicar tu pensamiento.
3. Antes de tomar la pluma, hay que saber exactamente cómo se expresaría de viva voz lo que se tiene que decir. Escribir debe ser sólo una imitación.
4. El escritor está lejos de poseer todos los medios del orador. Debe, pues, inspirarse en una forma de discurso muy expresiva. Su reflejo escrito parecerá de todos modos mucho más apagado que su modelo.
5. La riqueza de la vida se traduce por la riqueza de los gestos. Hay que aprender a considerar todo como un gesto: la longitud y la cesura de las frases, la puntuación, las respiraciones; También la elección de las palabras, y la sucesión de los argumentos.
6. Cuidado con el período. Sólo tienen derecho a él aquellos que tienen la respiración muy larga hablando. Para la mayor parte, el período es tan sólo una afectación.
7. El estilo debe mostrar que uno cree en sus pensamientos, no sólo que los piensa, sino que los siente.
8. Cuanto más abstracta es la verdad que se quiere enseñar, más importante es hacer converger hacia ella todos los sentidos del lector.
9. El tacto del buen prosista en la elección de sus medios consiste en aproximarse a la poesía hasta rozarla, pero sin franquear jamás el límite que la separa.
10. No es sensato ni hábil privar al lector de sus refutaciones más fáciles; es muy sensato y muy hábil, por el contrario, dejarle el cuidado de formular él mismo la última palabra de nuestra sabiduría.

LA COMPUTADORA Y YO
Eduardo Galeano
No bien llegué a territorio norteamericano, me acerqué a una computadora y pulsé la tecla Quejas. Mis viejas convicciones anti-imperialistas me impulsaron a protestar contra el muro que Estados Unidos está levantando en la frontera con México. Yo creía que esa vasta pared de acero se proponía impedir la libre circulación de las personas, al mismo tiempo que el Tratado de Libre Comercio aseguraba la libre circulación del dinero, y eso no me parecía bien. Pero la computadora despejó la confusión de mi espíritu: —No es un muro —explicó—. Es una obra de arte. Un gigantesco monumento que se erige en memoria de los mártires del oprobioso Muro de Berlín.
Entonces pulsé la tecla Dudas. Se me ocurrió plantear el caso de las leyes contra los inmigrantes. Leyes ya aprobadas, como la 187 de California, que suprime los derechos de los inmigrantes ilegales, y leyes anunciadas, como las que amenazan suprimir también los derechos de los inmigrantes legales. Mi duda era: ¿Se proponen estas leyes beneficiar a los indios? Siendo Estados Unidos una nación de inmigrantes, sólo los indígenas, los Native Americans, quedarían a salvo de esas medidas. Me parecía un gesto conmovedor: una expiación histórica, al cabo de tanto crimen y de tanto desprecio. Pero la máquina me aclaró las cosas: en América, inmigrantes son todos, y los indios también. Ellos vinieron desde el Asia, hace 30 mil años. Las leyes no tendrán excepciones.
Pulsé la tecla Iniciativas. Pregunté si ya existía algún proyecto para fabricar una tinta mágica, que fuera capaz de bañar a la mano de obra latinoamericana, para hacerla invisible, cada día, a la caída del sol, después de las horas de trabajo en los campos y en las calles del norte. Esa tinta podría evitar la molesta presencia de los braceros mexicanos y centroamericanos en las plazas, cines, restoranes y otros lugares públicos de los pueblos y ciudades de Estados Unidos.
—No todavía —informó la computadora.
Volví a pulsar la tecla Iniciativas. Pregunté si a nadie se le había ocurrido la idea de abrir una embajada de los Estados Unidos de América en Estados Unidos de América, con sede en Washington, para que la CIA pudiera organizar golpes de Estado también en su propio país.
—No todavía —repitió la computadora.
Regresé a la tecla Dudas. Pregunté: ¿No será un error que se llame Secretaría de Defensa al órgano de gobierno que se ocupa de la fuerza militar de Estados Unidos? ¿No será un error llamar Presupuesto de Defensa al dinero que la alimenta? Defensa me parecía una palabra equivocada, teniendo en cuenta que Estados Unidos no ha sido jamás invadido por nadie, pero en cambio se ha dedicado a invadir a los demás, desde los albores de su vida independiente, a un promedio de una invasión por año. ¿Y por qué esos gastos de Defensa siguen siendo tan enormes, casi el doble que en 1980? ¿Defensa contra quién, si ahora los rusos son buenos? Con cibernética impaciencia, la máquina me cortó el discurso y puso las cosas en su lugar: —El mundo amenaza —explicó—. No se puede confiar en nadie. Los buenos de ayer pueden ser los malos de hoy. Los buenos de hoy pueden ser los malos de mañana.
Yo agradecí la información, pero pedí a la computadora que me diera un ejemplo, sin ánimo de abusar de la buena voluntad de la tecnología.
—El tabaco —respondió la máquina.
En ese momento se me iluminó la cabeza. Me di cuenta de que ésa era una tremenda verdad: ayer el cigarrillo había sido bueno, en los labios de Humphrey Bogart o del vaquero de Marlboro, pero hoy es malo. Malísimo. Estados Unidos ha declarado la guerra santa contra el cigarrillo. Ignorante de mí, pregunté: ¿Por qué? ¿Se prohibe el cigarrillo porque da cáncer, o porque da placer? Entonces la computadora se desconectó. Y yo me quedé sin saber si los marines iban a invadir a los países fumantes, para salvar al mundo del pecado del humo. No habiendo más enemigos a la vista, ésa me parecía una promisoria posibilidad para el Pentágono y su presupuesto.
La máquina se negó a seguir funcionando. No me sorprendió. Yo nunca he tenido confianza en las computadoras. Siempre he sospechado que ellas beben de noche, cuando nadie las ve.
(Eduardo Galeano)

miércoles, 23 de mayo de 2007

Narrativa para la PSU


PSU - Literatura. Género Narrativo. Personajes, Tiempo, Ambiente, Argumento, Acontecimientos.

Literatura. Género Narrativo. Personajes, Tiempo, Ambiente, Argumento, Acontecimientos. Objetivo: Reconocer las características del género narrativo, identificando sus principales elementos.

Literatura. Género Narrativo. Personajes, Tiempo, Ambiente, Argumento, Acontecimientos.

Objetivo: Reconocer las características del género narrativo, identificando sus principales elementos.

• Personajes: Término derivado del latín que significa “máscara”. Recoge el significado del término griego “prosopon” (rostro), que alude a papel. Entes de ficción creados por el autor que participan en los acontecimientos de la historia.

SEGÚN SU GRADACIÓN JERÁRQUICA SE CLASIFICAN EN:

• Protagonistas: son los de mayor influencia en el desarrollo de la historia; aparecen desde el comienzo hasta el desenlace o final. La narración carecería de sentido sin ellos. El o los personajes principales se destacan porque funcionan como integradores de la organización de los acontecimientos, por lo tanto, son parte estructurante de la acción y su participación no podría ser olvidada.

• Secundarios: suelen aparecer y desaparecer, raramente figuran a lo largo de toda la historia, pero cumplen una función caracterizadora de tipos y situaciones estereotipadas.

SEGÚN SU GRADACIÓN JERÁRQUICA SE CLASIFICAN EN:

· Personales incidentales o episódicos: Tal como lo dice su nombre, son personajes que no tienen una presencia permanente en los hechos. Su participación es un recurso para ordenar, exponer, entrabar, relacionar, coordinar y también retardar el desarrollo de los acontecimientos.

SEGÚN UNIDAD O PLURALIDAD:

• Individual: relevancia como individuo que realiza determinadas acciones.

• Colectivo: relevancia como una unión de personas que realizan las acciones. Ejemplo: “Crónica de una muerte anunciada”, personaje colectivo que representa el pueblo-espectador de los acontecimientos se le puede considerar también un personaje colectivo.

SEGÚN SU ACTUACIÓN EN EL MUNDO:

• Protagonista: es un personaje que busca un buen objetivo.

• Antagonista: personaje que se opone a los intereses o deseos del principal e intenta obstaculizar la concreción de sus actos o hazañas. Ambos en consecuencia pueden tener ayudantes o enemigos.

CLASIFICACIÓN SEGÚN SU GÉNESIS Y DESARROLLO:

• Dinámicos o evolutivos: evolucionan en el transcurso del relato. Los acontecimientos moldean su personalidad.
Ejemplo: Lazarillo de Tormes, al final del relato no es el mismo niño inocente que deambula con el ciego por Salamanca al inicio de la acción, las desventuras y el medio corrupto van moldeando su personalidad.

• Estáticos: permanecen sin cambio alguno en su ser y actuar.
Ejemplo: Amadís de Gaula, permanece intacto en el desarrollo de la historia.

CLASIFICACIÓN SEGÚN SU GRADO DE COMPLEJIDAD EN LA CONFIGURACIÓN:

• Plano: ente creado en torno a una sola idea o cualidad.

• Redondo, esféricos o en relieve: ente que posee mayor grado de complejidad, ambigüedad y consistencia sicológica.

• Personajes tipo: Los personajes tipo representan algo, alguna característica de un sector social humano, de un tipo determinado.

• Personajes caricaturescos: Son utilizados para hacer una crítica a algún aspecto de la realidad social o personal.

SEGÚN CONFIGURACIÓN Y GRADO DE INDIVIDUALIDAD:

• Estereotipos: responden a una imagen prefijada y reiterada de formas conductuales y expresivas, como resultado de la tradición literaria, ejemplo, el viejo verde, la mujer dominante.

• Tipos: es portador de rasgos psicológicos y morales reconocidos, representa a un sector de la sociedad, por ejemplo, el provinciano en Martín Rivas, el caballero andante en Don Quijote.

• Personajes literarios: el lector los ubica por sus nombres propios: saben como actúan y por qué, son de rasgos de personalidad muy fuertes, por ejemplo, tenemos a la Celestina, el Cid, Papelucho.

• Espacio: Lugar en el que transcurre la acción del relato, presentado por el narrador y a veces por un personaje. Es el entorno donde sucede la historia. Puede ser una ciudad, una habitación o la cabeza de un personaje.

Clasificación

• Físico: Lugar donde suceden los acontecimientos. Puede ser abierto o cerrado.

• Psicológico: atmósfera espiritual que envuelve a los personajes y a la acción. Ej.: ambiente de tristeza.

• Social: entorno cultural, histórico, económico, social etc. donde se desarrollan los hechos.

· Tiempo: en un relato el tiempo adquiere un valor diferente, según sea real o imaginario.

· Tiempo real: cronológico, continuidad de los hechos, lineal, causa efecto.

· Tiempo imaginario: se produce una ruptura del tiempo cronológico, se presentan otras alternativas.

· Tiempo de la historia: presenta las acciones en un orden lógico y causal. A través de una sucesión cronológica de acciones relacionadas según causa y efecto. No siempre coincide con el tiempo del relato.

· Tiempo del relato: es la disposición estética del acontecer de la narración. El narrador organiza el Tiempo de la historia de tal modo de instaurar un temporalidad artística. Esto se logra a través de la anacronía.

martes, 22 de mayo de 2007

Hablemos de PUNTUACION

El punto, la coma, el punto y coma, los dos puntos y los puntos suspensivos se escriben siempre sin dejar un espacio de separación con respecto a la palabra o el signo que precede, y separados por un espacio de la palabra o el signo que sigue, a no ser que este sea de cierre.
Los signos dobles, como los de interrogación y exclamación, los paréntesis, los corchetes, las comillas y las rayas que encierran aclaraciones e incisos, todos ellos compuestos por un signo de apertura y uno de cierre, se escriben de la manera siguiente:
a) Los de apertura se separan por medio de un espacio de palabra o signo al que siguen, y se escriben sin espacio de separación con respecto a la palabra a la que anteceden (sin embargo, la raya que introduce la intervención de un personaje en un diálogo se escribe sin espacio de separación de la palabra que sigue. Con excepción de la raya que introduce la intervención de un personaje en un diálogo se escribe también sin espacio de separación de la palabra que sigue.
b) Por el contrario, los signos de cierre se escriben sin espacio de separación con respecto a la palabra o signo al que siguen, separados por un espacio de la palabra a la que preceden y sin este espacio si lo que sigue es un signo de puntuación.
Ejemplos:
¿Se trató el asunto en la reunión ?; ¿concretaron algo?
Ya conoces su refrán preferido: «Agua que no has de beber.. ».
La boda se celebrará en la parroquia de la Asunción (plaza de la Prosperidad, número 3), a la una de la tarde.
Cuando decidimos trasladarnos a Guadalajara -una decisión meditada-, el negocio iba viento en popa.


Uso del punto
El punto (.) señala la pausa que se da al final de un unciado. Después de punto -salvo en el caso del utilizado en las abreviaturas- siempre se escribe mayúscula.
Hay tres clases de punto: el punto y seguido, el punto y el punto final.
a) El punto y seguido separa enunciados que integran un párrafo. Después de un punto y seguido se continúa escribiendo en la misma línea. Si el punto está al fin de renglón, se empieza en el siguiente sin dejar margen. Por ejemplo:
Salieron a dar un breve paseo. La mañana era espléndida.
b) El punto y aparte separa dos párrafos distintos, que suelen desarrollar, dentro de la unidad del texto, contenidos diferentes. Después de punto y aparte se escribe en una línea distinta. La primera línea del nuevo párrafo debe tener un margen mayor que el resto de las líneas que lo componen, es decir, ha de quedar sangrada. Por ejemplo:
El mar estaba embravecido aquel día. Los barcos bailaban sobre el agua sorteando las olas con dificultad.
Miguel, sentado en el muelle, esperaba el regreso de su padre. Atisbaba el horizonte buscando ansioso su barco con la mirada.
c) El punto final es el que cierra un texto.
Otro uso del punto
El punto se utiliza también después de las abreviaturas. Ejemplos: Sra., Excmo., Cf.
Combinación del punto con otros signos
A menudo es necesario combinar el punto con otros signos que también cierran períodos, como son los paréntesis o las comillas. En estos casos, se coloca el punto siempre detrás de las comillas, corchetes o paréntesis de cierre. Por ejemplo:
Sus palabras fueron estas: «No quiero volver a verte». Después cerró de golpe la puerta de su casa. (Creo que estaba muy enojada).
Sobre la colocación del punto en comentarios y aclaraciones señaladas con raya.
Uso Incorrecto del punto
Los títulos y los subtítulos de libros, artículos, capítulos, obras de arte, etc., cuando aparecen aislados, no llevan punto final. Ejemplos:
El llano en llamas
La Venus del espejo

Uso de la coma
La coma (,) indica una pausa breve que se produce dentro del enunciado.
Se emplea para separar los miembros de una enumeración, salvo los que vengan precedidos por alguna de las conjunciones y, e, o, u. Ejemplos:
Es un chico muy reservado, estudioso y de buena familia.
Acudió toda la familia: abuelos, padres, hijos, cuñados, etc.
¿Quieres café, te o un refresco?
Cuando los elementos de la enumeración constituyen el sujeto de la oración o un complemento verbal y van antepuestos al verbo, no se pone coma detrás del último. Ejemplos:
El perro, el gato y el ratón son animales mamíferos.
De gatos, de ratones y de perros no quiere ni oír hablar
Se usa coma para separar miembros gramaticalmente equivalentes dentro de un mismo enunciado, a excepción de los casos en los que medie alguna de las conjunciones y, e, ni, o, u. Ejemplos:
Estaba preocupado por su familia, por su trabajo, por su salud.
Antes de irte, corre las cortinas, cierra las ventanas, apaga las luces y echa la llave.
Sin embargo, se coloca una coma delante de la conjunción cuando la secuencia que encabeza expresa un contenido (consecutivo, de tiempo, etc.) distinto al elemento o elementos anteriores. Por ejemplo:
Pintaron las paredes de la habitación, cambiaron la disposición de los muebles, y quedaron encantado.
También cuando esa conjunción está destinada a enlazar con toda la proposición anterior, y no con el último de sus miembros. Por ejemplo:
Pagó el traje, el bolso y los zapatos, y salió de la tienda.
Siempre será recomendable su empleo, por último, cuando el periodo sea especialmente largo. Por ejemplo:
Los instrumentos de precisión comenzaron a perder su exactitud a causa de la tormenta, y resultaron inútiles al poco tiempo.
En una relación cuyos elementos están separados por punto y coma, el último elemento, ante el que aparece la conjunción copulativa, va precedido de coma o punto y coma. Ejemplos:
En el armario colocó la vajilla; en el cajón, los cubiertos; en los estantes, los vasos, y los alimentos, en la despensa.
Con gran aplomo, le dijo a su familia que llegaría a las tres; a sus amigos, que lo esperasen a las cinco; y consiguió ser puntual en los dos casos.
Se escribe una coma para aislar el vocativo del resto de la oración. Ejemplos:
Julio, ven acá.
He dicho que me escuchéis, muchachos.
Cuando el vocativo va en medio del enunciado, se escribe entre dos comas. Por ejemplo:
Estoy alegre, Isabel, por el regalo.
Los incisos que interrumpen una oración, ya sea para aclarar o ampliar lo dicho, ya sea para mencionar al autor u obra citados, se escriben entre comas. Son incisos casos como los siguientes:
a) Aposiciones explicativas. Por ejemplo:
En ese momento Adrián, el marido de mi hermana, dijo que nos ayudaría.
b) Las proposiciones adjetivas explicativas. Por ejemplo:
Los vientos del Sur, que en aquellas abrasadas regiones son muy frecuentes, incomodan a los viajeros.
e) Cualquier comentario, explicación o precisión a algo dicho. Ejemplos:
Toda mi familia, incluido mi hermano, estaba de acuerdo.
Ella es, entre mis amigas, la más querida.
Nos proporcionó, después de tantos disgustos, una gran alegría.
d) La mención de un autor u obra citados. Por ejemplo:
La verdad, escribe un político, se ha de sustentar con razones y autoridades.

Cuando se invierte el orden regular de las partes de un enunciado, anteponiendo elementos que suelen ir pospuestos, se tiende a colocar una coma después del bloque anticipado. No es fácil establecer con exactitud los casos en que esta anteposición exige el uso de la coma. Pero frecuentemente puede aplicarse esta norma práctica:
a) Si el elemento antepuesto admite una paráfrasis con «en cuanto a», es preferible usar coma. Por ejemplo:
Dinero, ya no le queda. (Es posible decir En cuanto al dinero, ya no le queda).
b) Si, por el contrario, admite una paráfrasis con «es lo que» o «es el que», no se empleará coma. Por ejemplo:
Vergüenza debería darte. (Equivalente a Vergüenza es lo que debería darte).

También suele anteponerse una coma a una conjunción o locución conjuntiva que une las proposiciones de una oración compuesta, en los casos siguientes:
a) En las proposiciones coordinadas adversativas introducidas por conjunciones como pero, mas, aunque, sino. Ejemplos:
Puedes llevarte mi cámara de fotos, pero ten mucho cuidado.
Cogieron muchas cerezas, aunque todas picadas por los pájaros.
b) Delante de las proposiciones consecutivas introducidas por
conque, así que, de manera que... Ejemplos:
Prometiste acompañarle, conque ya puedes ir poniéndote el abrigo.
El sol me está dando en la cara, así que tendré que cambiarme de asiento.
e) Delante de proposiciones causases lógicas y explicativas. Ejemplos:
Es noble, porque tiene un palacio.
Están en casa, pues tienen la luz encendida.
Los enlaces como esto es, es decir, o sea, en fin, por último, por consiguiente, sin embargo, no obstante, además, en tal caso, por lo tanto, en cambio, en primer lugar, y también, a veces, determinados adverbios o locuciones que desempeñan la función de modificadores oracionales, como generalmente, posiblemente, efectivamente, finalmente, en definitiva, por regla general, quizás, colocados al principio de una oración, se separan del resto mediante una coma. Ejemplos:
Por consiguiente, no vamos a tomar ninguna resolución precipitada.
No obstante, es necesario reformar el estatuto.
Efectivamente, tienes razón.
Cuando estas expresiones van en medio de la oración, se escriben entre comas. Ejemplos:
Estas dos palabras son sinónimos, es decir, significan lo mismo.
Tales incidentes, sin embargo, no se repitieron.
Este tipo de accidentes están causados, generalmente, por errores humanos.
Si los bloques relacionados mediante estos enlaces forman parte de la misma oración compuesta escrita entre puntos, se suelen separar con punto y coma colocado delante del enlace, al que seguirá una coma.
En los casos en que se omite un verbo, porque ha sido anteriormente mencionado o porque se sobrentiende, se escribe en su lugar una coma. Ejemplos:
El árbol perdió sus hojas; el viejo, su sonrisa.
Los niños, por aquella puerta.
En matemáticas, un genio; para la música, bastante mediocre.
En las cabeceras de las cartas, se escribe coma entre el lugar y la fecha. Por ejemplo:
Concepción, enero 25 de 2000.
Se escribe coma para separar los términos invertidos del nombre completo de una persona o los de un sintagma que integran una lista (bibliografía, índice...). Ejemplos:
BELLO, Andrés: Gramática de la lengua castellana destinada al uso de los americanos.
CUERVO, Rufino José: Diccionario de construcción y régimen de la lengua castellana.
construcción, materiales de
papelería, artículos de

Uso incorrecto de la coma
Debe evitarse separar el sujeto y el predicado mediante coma. Ejemplos de incorrección.
*Las estanterías del rincón, estaban perfectamente organizadas.
*Un desgraciado incidente, ocasionó la dimisión de la junta directiva.
Se exceptúan los casos en que media un inciso entre sujeto y predicado. Ejemplos:
La medicina preventiva, como ya ha quedado apuntado anteriormente, permitirá evitar la enfermedad en breve plazo.
La presencia de la protagonista de la película, que vestía un espectacular traje de noche, produjo muy diferentes comentarios.

Uso de los dos puntos
Los dos puntos (:) detienen el discurso para llamar la atención sobre lo que sigue.Se usan dos puntos en los casos siguientes:
Después de anunciar una enumeración. Ejemplos:
Van a subastar tres manuscritos: uno de Borges, otro de Alfonso Reyes y un tercero de Antonio Machado. Tres son las provincias aragonesas: Huesca, Zaragoza y Teruel.
También para cerrar una enumeración, antes del anafórico que los sustituye, se utilizan los dos puntos. Ejemplos:
Natural, sana y equilibrada: así debe ser una buena alimentación.Terremotos, inundaciones y erupciones volcánicas: esas son las principales catástrofes naturales.
Los dos puntos preceden a las citas textuales. En este caso, después de los dos puntos se suele escribir la primera palabra con inicial mayúscula. Ejemplos:
Las palabras del médico fueron: «Reposo y una alimentación equilibrada». Ya lo dijo Descartes: «Pienso, luego existo».
Se emplea este signo de puntuación tras las fórmulas de saludo en las cartas y documentos. También en este caso la palabra que sigue a los dos puntos se escribe con mayúscula y, generalmente, en un renglón aparte. Ejemplos:
Querido amigo: Te escribo esta carta para comunicarte...
Muy señor mío: Le agradecer se sirva tomar a su cargo ...

Se emplean los dos puntos para conectar oraciones o proposiciones relacionadas entre sí sin necesidad de utilizar otro nexo. Son varias las relaciones que se pueden expresar:
a) Relación causa-efecto. Ejemplos:
Se ha quedado sin trabajo: no podrá ir de vacaciones este verano.
No necesitaba correr: aún era pronto.
b) Conclusión o resumen de la proposición anterior. Por ejemplo:
Varios vecinos monopolizaron la reunión con problemas partículares: no llegaron a ponerse de acuerdo.
c) Verificación o explicación de la proposición anterior, que suele tener un sentido más general. Por ejemplo:
La paella es un plato de la cocina española muy completo desde el punto de vista nutritivo: cuenta con la fécula del arroz, las proteínas de sus carnes y pescados y la fibra de sus verduras.
Se utilizan los dos puntos para separar la ejemplificación del resto de la oración. Ejemplos:
De vez en cuando tiene algunos comportamientos inexplicables: hoy ha venido a la oficina con las zapatillas de andar por casa.
Puedes escribir un texto sobre algún animal curioso: el ornitorrinco, por ejemplo.

En textos jurídicos y administrativos --decretos, sentencias, bandos, edictos, certificados o instancias-, se colocan dos puntos después del verbo, escrito con todas sus letras mayúsculas, que presenta el objetivo fundamental del documento. La primera palabra del texto que sigue a este verbo se escribe siempre con inicial mayúscula y el texto forma un párrafo diferente. Por ejemplo:

CERTIFICA:
Que D. José Álvarez García ha seguido el Curso de Técnicas Audiovisuales celebrado en la Escuela de Cine durante los meses de abril y mayo del presente año.

Uso del punto y coma
El punto y coma (;) indica una pausa superior a la marcada por la coma e inferior a la señalada por el punto. Se utiliza en estos casos:
Para separar los elementos de una enumeración cuando se trata de expresiones complejas que incluyen comas. Ejemplos:
La chaqueta es azul; los pantalones, grises; la camisa, blanca; y el abrigo, negro.
Cada uno de los grupos de trabajo preparará un taller: el primer grupo, el taller de cerámica; el segundo, el taller de telares.; el tercero, el taller de cestería.
Para separar proposiciones yuxtapuestas, especialmente cuando en estas se ha empleado la coma. Ejemplos:
Era necesario que el hospital permaneciese abierto toda la noche; hubo que establecer turnos.
La muchacha, gozosa, corría hacia su casa; sus padres acababan de llegar
La situación económica de la empresa, agravada en los últimos tiempos, era preocupante; se imponía una acción rápida y contundente, sí se deseaba salvar los puestos de trabajo.
A las cinco de la madrugada aún había luz en su habitación; seguramente, se había quedado dormido leyendo.
En muchos de estos casos, se podría optar por separar los períodos con punto y seguido. La elección del punto y seguido o del punto y coma depende de la vinculación semántica que exista entre las oraciones o proposiciones. Si el vínculo es débil, se prefiere usar un punto y seguido; mientras que, si es más sólido, es conveniente optar por el punto y coma.
También sería posible separar los mencionados períodos con dos puntos, puesto que casi siempre subyacen las mismas relaciones como fueron expresadas
anteriormente en los dos puntos.
Se suele colocar punto y coma, en vez de coma, delante de conjunciones o locuciones conjuntivas como pero, mas y aunque, así como sin embargo, por tanto, por consiguiente, en fin, etc., cuando los períodos tienen cierta longitud y encabezan la proposición a la que afectan. Ejemplos:
Su discurso estuvo muy bien construido y fundamentado sobre sólídos principios; pero no consiguió convencer a muchos de los participantes en el Congreso.
Los jugadores se entrenaron intensamente durante todo el mes; sin embargo, los resultados no fueron los que el entrenador esperaba.
Las últimas pruebas que han llegado de la imprenta parecen muy limpias; por tanto, creo que no tardaré mucho en revisarlas y devolverlas (Sobre el uso de la coma después de algunas de estas locuciones conjuntivas,
véase aquí).
Si los bloques no son muy largos, se prefiere
la coma, véase también aquí. Ejemplos:
Vendrá, pero tarde.
Lo hizo, aunque de mala gana.
Si los períodos tienen una longitud considerable, es mejor separarlos con punto y seguido. Por ejemplo:
Este verano, varios vecinos del inmueble tienen previsto poner en venta sus respectivas viviendas. Por consiguiente, son previsibles numerosas visitas de posibles compradores.


Uso de los puntos suspensivos

Los puntos suspensivos (...) suponen una interrupción de la oración o un final impreciso. Después de los puntos suspensivos, cuando cierran un enunciado, se escribe mayúscula. Por ejemplo:
El caso es que si lloviese... Mejor no pensar cosa tan improbable.
Estamos ante un bosque mediterráneo de encinas, alcornoques, pinos... Bajo estos árboles es fácil encontrar níscalos en otoños lluviosos.
Cuando los puntos suspensivos no cierran un enunciado y este continúa tras ellos, se escribe minúscula. Por ejemplo:
Estoy pensando que... aceptaré; en esta ocasión debo arriesgarme.


Se usan los puntos suspensivos en los siguientes casos:
Al final de enumeraciones abiertas o incompletas, con el mismo valor que la palabra etcétera. Ejemplos:
Su tienda es como las de los pueblos, donde se vende de todo: comestibles, cacharros, ropas, juguetes...
Puedes hacer lo que te apetezca más: leer, ver la televisión, escuchar música...
Cuando se quiere expresar que antes de lo que va a seguir ha habido un momento de duda, temor o vacilación. Ejemplos:
Iré; no iré... Debo decidirme pronto.
Espero una llamada del hospital... Seguro que son buenas noticias. No sé... Creo que... bueno, sí, me parece que voy a ir
En ocasiones, la interrupción del enunciado sirve para sorprender al lector con lo inesperado de la salida. Por ejemplo:
Se convocó a una junta, se distribuyeron centenares de papeles anuncíándola y, al final, nos reunimos... cuatro personas.
Para dejar un enunciado incompleto y en suspenso se utilizan los puntos suspensivos. Por ejemplo:
Fue todo muy violento, estuvo muy desagradable... No quiero seguir hablando de ello.
También se emplea este signo de puntuación cuando se reproduce una cita textual, sentencia o refrán, omitiendo una parte. Ejemplos:
En ese momento de indecisión, pensé: «Más vale pájaro en mano ...» y acepté el dinero.
El escolar recitaba muy solemne: «Con diez cañones por banda ... ».

Se escriben tres puntos dentro de paréntesis ( ... ) o corchetes [...] cuando al transcribir literalmente un texto se omite una parte de él. Por ejemplo:
Yo fui loco y ya soy cuerdo; fui don Quijote de la Mancha y soy agora Alonso Quijano el Bueno.(Cervantes: Quijote, 11, LXXIV)

Combinación de los puntos suspensivos con otros signos
Tras los puntos suspensivos no se escribe nunca punto. Sin embargo, sí pueden colocarse otros signos de puntuación, como la coma, el punto y coma y los dos puntos. Ejemplos:
Cuando decidas los colores, las telas, el tipo de mobiliario .... ven a verme y haremos un presupuesto.
Pensándolo bien..: mejor que no se presente.
Ya habían llegado los libros, los ordenadores, el papel ... ; al día siguiente empezaría a trabajar

Los signos de interrogación o exclamación se escriben delante o detrás de los puntos suspensivos, dependiendo de que el enunciado que encierran esté completo o incompleto. Ejemplos:
¿Me habrá traído los libros?... Seguro que sí.
¡Si te dije que ... ! Es inútil, nunca haces caso a nadie.
Tanto la coma, el punto y coma y los dos puntos como los signos de interrogación y exclamación se escribirán inmediatamente, sin un espacio que los separe de los puntos suspensivos, tal y como muestran los ejemplos anteriores (Tales signos son los que imponen en estos casos el uso de la mayúscula o la minúscula en la palabra).

Uso de los signos de interrogación y de exclamación
Los signos de interrogación (¿?) y exclamación (i!) encierran enunciados que, respectivamente, interrogan o exclaman. Los primeros se utilizan para delimitar enunciados interrogativos directos; los segundos demarcan enunciados exclamativos, también en estilo directo, e interjecciones. Ejemplos:
¿Comisteis ayer en casa?
¿Dónde has comprado ese traje?
¡Eso es una injusticia!
¡Qué magnífica pintura!
¡Ay! ¡Eh! ¡Oh!
En la utilización de tales signos es preciso tener en cuenta estas consideraciones generales:
Los signos de interrogación y de exclamación son dos en cada caso: los signos que indican apertura (¿ i) y los signos que indican cierre (? !); se colocan al principio y al final del enunciado interrogativo y exclamativo respectivamente.
En nuestra lengua es obligatorio poner siempre el signo de apertura, que no deberá suprimiese a imitación de lo que ocurre en la ortografía de otras lenguas, en las que solo se usa el signo final porque tienen otras marcas gramaticales que suplen el primero. No obstante,
véase una excepción.

Después de los signos que indican cierre de interrogación o exclamación (? !) no se escribe nunca punto.
El signo de principio de interrogación (¿) o de exclamación (i) se ha de colocar donde empieza la pregunta o la exclamación, aunque no comience con él el enunciado. Ejemplos:
Con respecto al impacto ambiental, ¿se ha previsto algún tipo de medidas para que su efecto sea el menor posible?
Si consigues la plaza, ¡qué alegría se va a llevar tu padre!


Obsérvese cómo los vocativos y las proposiciones subordinadas, cuando ocupan el primer lugar en el enunciado, se escriben fuera de la pregunta o de la exclamación. Sin embargo, si están colocados al final, se consideran dentro de ellas. Ejemplos:
Susana, ¿has decidido qué vas a hacer? ¿Has decidido qué vas a hacer, Sonia?
Pepe, ¡cuánto me alegro de que hayas venido! ¡Cuánto me alegro de que hayas venido, Pepe!
Si no responde, ¿qué le vamos a decir? ¿Qué le vamos a decir si no responde?
Cuando se escriben varias preguntas o exclamaciones seguidas y estas son breves, se puede optar por considerarlas oraciones independientes, con sus correspondientes signos de apertura y cierre, y con mayúscula al comienzo de cada una de ellas. Ejemplos:
¿Dónde estás? ¿A qué hora piensas volver?
i Quedan cinco minutos! i Llegamos tarde! i Date prisa!

Pero también es posible considerar el conjunto de las preguntas o exclamaciones como un único enunciado. En este caso hay que separarlas por comas o por puntos y comas, y solo en la primera se escribirá la palabra inicial con mayúscula. Ejemplos:
¿Cómo te llamas?, ¿en qué trabajas?, ¿cuando naciste?, ¿dónde?
¡Como ha nevado esta noche!; ¡qué blanco está todo!; iqué frío vamos a pasar hoy!
En ocasiones, se utilizan los signos de final de interrogación (?) o de exclamación (!) entre paréntesis.
a) El signo de final de interrogación entre paréntesis expresa duda o ironía. Ejemplos:
Andrés Sánchez López es el presidente (?) de la asociación.
Tendría mucha gracia (?) que llegara a la cita con un día de retraso.
b) El signo de final de exclamación entre paréntesis expresa sorpresa o ironía. Ejemplos:
Un joven de treinta y seis años (!) fue el ganador del con curso de composición.
Está más gordo que nunca, pero dice que solo pesa ochenta kilos (!) en la báscula de su casa.

Uso de los paréntesis
Los paréntesis son signos que encierran elementos incidentales o aclaratorios intercalados en un enunciado. Los paréntesis se usan en los siguientes casos:
Cuando se interrumpe el sentido del discurso con un inciso aclaratorio o incidental, sobre todo si este es largo o de escasa relación con lo anterior o posterior. Ejemplos:
El abuelo de Alberto (en su juventud fue un brillante cirujano) parecía una estatua sentado en aquel sillón.
Las asambleas (la última duró casi cuatro horas sin ningún descanso) se celebran en el salón de actos (para estos incisos también puede
utilizar rayas).
Para intercalar algún dato o precisión: fechas, lugares, significado de siglas, el autor u obra citados... Ejemplos:
El año de su nacimiento (1616) es el mismo en que murió Cervantes.
Toda su familia nació en Córdoba (Argentina).
Una ONG (organización no gubernamental) ha de ser, por principio, una asociación sin ánimo de lucro.
«Más obran quintaesencias que fárragos» (Gracián)
En ocasiones se utilizan los paréntesis para evitar introducir una opción en el texto. En estos casos se puede encerrar dentro del paréntesis una palabra completa o solo uno de sus segmentos. Ejemplos:
En el documento se indicarán el (los) día(s) en que haya tenido lugar la baja.
Cuando se reproducen o transcriben textos, códices o inscripciones con abreviaturas, se pueden utilizar los paréntesis para reconstruir las palabras completas o los elementos que faltan en el original y se suplen. por ejemplo:
Imp(eratori) Caes (ari).


En la transcripción de textos se utilizan tres puntos entre paréntesis para dejar constancia de que se omite en la cita un fragmento del texto (en este uso suelen alternar con
los corchetes, véase detalle). Por ejemplo:
Hasta aquí ( ... ) la obra visible de Menard, en su orden cronológico. Paso ahora a la otra: la subterránea, la interminablemente heroica, la impar También, ¡ay de las posibilidades del hombre!, la inconclusa. Esa obra (... ) consta de los capítulos noveno y trigésimo octavo de la primera parte del don Quijote y de un fragmento del capítulo veintidós.
(Jorge Luis Borges: ficciones)
Las letras o números que encabezan clasificaciones, enumeraciones, etc. pueden situarse entre paréntesis o seguidas del paréntesis de cierre. Ejemplos:
Estos libros podrán encontrarse en los lugares siguientes:
(a) En los estantes superiores de la sala de juntas. (b) En los armarios de la biblioteca principal.
0 bien:
Estos libros podrán encontrarse en los lugares siguientes:
a) En los estantes superiores de la sala de juntas.

b) En los armarios de la biblioteca principal.

Combinación de los paréntesis con otros signos
Los signos de puntuación correspondientes al periodo en el que va inserto el texto entre paréntesis se colocan siempre después del de cierre. Ejemplos:
Tenía varios hermanos (era el primogénito de una numerosa familia), pero no los veía desde hacía años.¿En qué año se creó la ONU (
Organización de las Naciones Unidas)?
El texto recogido dentro de los paréntesis tiene una puntuación independiente. Por eso, si el enunciado entre paréntesis es interrogativo o exclamativo, los signos de interrogación y exclamación se colocan dentro de los paréntesis. Ejemplos:
Ángel Peláez (sí supieses lo que opina sobre la ecología y los ecologistas, no te caería tan bien) es el nuevo responsable del proyecto.
La manía de Ernesto por el coleccionismo (Lo colecciona todo: sellos, monedas, relojes, plumas, llaveros ... ) ha convertido su casa en un almacén.
Su facilidad para los idiomas (¡habla con fluidez siete lenguas!) le ha abierto muchas puertas.


Uso de los corchetes
Los corchetes [ ] se utilizan por regla general de forma parecida a los paréntesis que incorporan información complementaria o aclaratorio. La combinación de los corchetes con otros signos ortográficos es idéntica a la de los paréntesis. Los corchetes se utilizan en las ocasiones siguientes:
Cuando dentro de un enunciado o texto que va entre paréntesis es preciso introducir alguna nota aclaratorio o precisión. Por ejemplo:
Una de las últimas novelas que publicó Benito Pérez Galdós (algunos estudiosos consideran su obra Fortunata Jacinta [1886-87 ] la mejor novela española del siglo XIX) fue El caballero encantado (1909).
En poesía se coloca un solo corchete de apertura delante de las últimas palabras de un verso para indicar que no caben en la línea anterior. Ejemplo:

Soñaba en ese entonces en forjar un poema,de arte nervioso y nueva obra audaz y suprema,
escogí entre un asunto grotesco y otro trágico, llamé a todos los ritmos con un conjuro
[mágico
y los ritmos indóciles vinieron acercándose,juntándose en las sombras, huyéndose y [buscándose.
(José Asunción Silva: El libro de versos)

Cuando, en un texto trascrito, el copista o editor quiere incorporar alguna parte que falta, aclaración, nota, desarrollo de una abreviatura o cualquier interpelación ajena al texto original, se usan los corchetes. Por ejemplo:
La nieve hermoseaba [texto tachado: los parques y edificios de] la ciudad aquella fría mañana de diciembre.
También se utilizan los corchetes que encierran tres puntos suspensivos [ ... ] cuando en un texto trascrito se omite una parte de él, ya sea una sola palabra o un fragmento. Por ejemplo:
"Pensé en lo que usted me había enseñado: que nunca hay que odiar a nadie. Le sonreí para decírselo; pero después pensé que él no pudo ver mi sonrisa [ ... ] por lo negra que estaba la noche. "
(Juan Rulfo: Pedro Páramo)

Uso de la raya
La raya o guión largo (-) se puede usar aisladamente, o bien, como en el caso de otros signos de puntuación, para servir de signo de apertura y cierre que aísle un elemento o enunciado.
Este signo se utiliza con los fines siguientes:
Para encerrar aclaraciones o incisos que interrumpen el discurso. En este caso se coloca siempre una raya de apertura antes de la aclaración y otra de cierre al final. Por ejemplo:
Llevaba la fidelidad a su maestro -un buen profesor- hasta extremos insospechados.
Esperaba a Emilio -un gran amigo-. Lamentablemente, no vino.
En este uso, las rayas pueden ser sustituidas por los paréntesis e incluso por comas. La diferencia entre una u otra opción depende de cómo perciba quien escribe el grado de conexión que el inciso mantiene con el resto del enunciado.
Para señalar cada una de las intervenciones de un diálogo sin mencionar el nombre de la persona o personaje al que corresponde. En este caso se escribe una raya delante de las palabras que constituyen la intervención. Por ejemplo:
-¿Qué has hecho esta tarde?-Nada en especial. He estado viendo la televisión un rato.
Para introducir o encerrar los comentarios o precisiones del narrador a las intervenciones de los personajes. Se coloca una sola raya delante del comentario del narrador, sin necesidad de cerrarlo con otra, cuando las palabras del personaje no continúan inmediatamente después del comentario. Por ejemplo:
-Espero que todo salga bien -dijo Azucena con gesto ilusionado.
Se escriben dos rayas, una de apertura y otra de cierre, cuando las palabras del narrador interrumpen la intervención del personaje y esta continúa inmediatamente después. Por ejemplo:
-Lo principal es sentirse viva -añadió Pilar-. Afortunada o desafortunada, pero viva.
Tanto en un caso como en el otro, si fuese necesario poner detrás de la intervención del narrador un signo de puntuación, una coma o un punto, por ejemplo, se colocará después de sus palabras y tras la raya de cierre (si la hubiese). Por ejemplo:
-¿Deberíamos hablar con él? –preguntó Juan-. Es el único que no lo sabe.
-Sí -respondió la secretaria-, pero no podemos decirle toda la verdad.
En algunas listas, como índices alfabéticos de libros o bibliografías, la raya sirve para indicar que en ese renglón se omite una palabra, ya sea un concepto antes citado o el nombre de un autor que se repite. Ejemplos:
Verbos intransitivos
- transitivos - irregulares - regulares
Ortega y Gasset, J.: España invertebrada (1920 -22). -: La rebelión de las masas (1930). -: Idea del teatro (1946).

Uso de las comillas
Hay diferentes tipos de comillas: las comillas angulares, también llamadas latinas o españolas (« »), las inglesas (" ") y las simples ( ´ ` ). Por lo general, es indistinto el uso de uno u otro tipo de comillas dobles; pero suelen alternarse cuando hay que utilizar comillas dentro de un texto ya entrecomillado. Por ejemplo:
Al llegar el coche deportivo, Lola susurró: « Vaya "cacharro" que se ha comprado Tomas».

Se utilizan comillas en los casos siguientes:
Para reproducir citas textuales de cualquier extensión. Ejemplos:
Fue entonces cuando la novia dijo: «Sí».
Sus palabras fueron: «Por favor, el pasaporte».
Dice Miguel de Unamuno en La novela de don Sandalio: «He querido sacudirme del atractivo del Casino, pero es imposible; la imagen de Don Sandalio me seguía a todas partes. Ese hombre me atrae como el que más de los árboles del bosque; es otro árbol más, un árbol humano, silencioso, vegetativo. Porque juega al ajedrez como los árboles dan hoja».
Cuando se ha de intercalar un comentario o intervención del narrador o transcriptor de la cita, no es imprescindible cerrar las comillas para volver a abrirlas después del comentario, pero puede hacerse. Para intercalar tales intervenciones, es preferible encerrarlas entre rayas. Por ejemplo:
« Los días soleados como este -comentó Silvia- me encantan ».
En textos narrativos, a veces se utilizan las comillas para reproducir los pensamientos de los personajes, en contraste con el uso de la raya, que transcribe sus intervenciones propiamente dichas. Por ejemplo:
-Es una mujer hermosa, hermosísima; si ustedes quieren, de talento, digna de otro teatro, de volar más alto ... ; si ustedes me apuran, diré que es una mujer superior -si hay mujeres así- pero al fin es mujer, et nihil humani...
No sabía lo que significaba ese latín, ni adónde iba a parar, ni de quién era, pero lo usaba siempre que se trataba de debilidades posibles.Los socios rieron a carcajadas.
« ¡Hasta en latín sabía maldecir el pillastre!», pensó el padre, más satisfecho cada vez de los sacrificios que le costaba aquel enemigo.
(Clarín: La Regenta, cap. IV)

Para indicar que una palabra o expresión es impropia, vulgar o de otra lengua, o que se utiliza irónicamente o con un sentido especial. Ejemplos:
Dijo, cargado de razón, que el asunto tenía algunas «prorrogativas».
En el salón han puesto una «boiserie» que les ha costado un dineral
Últimamente está muy ocupado con sus «negocios».
Para citar títulos de artículos, poemas, cuadros.... Ejemplos:
El artículo de Amado Alonso titulado «Noción, emoción, acción y fantasía en los diminutivos » está recogido junto con otros en un volumen antológico: Estudios lingüísticos. Temas españoles.
Nos leyó en voz alta el «Romance sonámbulo» del Romancero Gitano.
En esta sala se puede ver el «Esopo» de Velásquez.
Cuando en un texto se comenta o se trata una palabra en particular, esta se aísla escribiéndola entre comillas. Por ejemplo:
Como modelo de la primera conjugación, se utiliza usualmente el verbo «amar».
Cuando se aclara el significado de una palabra, este se encierra entre comillas. En tal caso se prefiere utilizar comillas simples. Por ejemplo:
«Espiar» (‘acechar ’) no significa lo mismo que «expiar» las faltas.

Combinación de las comillas con otros signos
Los signos de puntuación correspondientes al periodo en el que va inserto el texto entre comillas se colocan siempre después de las comillas de cierre. Ejemplos:
Sus palabras fueron: «No lo haré»; pero al final nos ayudó.
¿De verdad ha dicho: «Hasta luego»?
¡Menudo «collage»!
El texto recogido dentro de las comillas tiene una puntuación independiente y lleva sus propios signos ortográficos. Por eso, si el enunciado entre comillas es interrogativo o exclamativo, los signos de interrogación y exclamación se colocan dentro de estas. Ejemplos:
Se dirigió al dependiente: «Por favor, ¿dónde puedo encontrar cañas de pescar? ». « ¡Qué ganas tengo de que lleguen las vacaciones! », exclamó.

Otros signos ortográficos
La escritura del español también cuenta con otros signos auxiliares, que se exponen a continuación.

Diéresis o crema
La diéresis o crema ( ¨ ) es un signo que se coloca encima de las vocales en las siguientes ocasiones:
a) Para indicar que ha de pronunciarse la vocal u en las combinaciones gue y gui. En este caso, el uso de la diéresis es preceptivo. Ejemplos: vergüenza, pingüino, argüir
b) En textos poéticos, la diéresis puede usarse colocada sobre la primera vocal de un posible diptongo, para indicar que no existe. De esa forma la palabra a la que afecta y el verso en que se incluye cuentan con una sílaba más. Ejemplos:
El dulce murmurar deste rüido,el mover de los árboles al viento,el suave olor [ ... ]
(Garcilaso de la Vega: Égloga 11)

Guión
El guión (-) es un trazo horizontal de menor longitud que el signo llamado raya. Se utiliza básicamente cuando es necesario hacer divisiones dentro de una palabra y no se escribe entre espacios en blanco.
Tiene diferentes usos.
a) Se utiliza para separar, en determinados casos, los dos elementos que integran una palabra compuesta. Hay dos situaciones dignas de mención:
1. Los compuestos de nueva creación formados por dos adjetivos, el primero de los cuales conserva invariable la terminación masculina singular, mientras el segundo concuerda en género y número con el nombre al que se refiere. Ejemplos: tratado teórico-práctico, lección teórico- práctica, cuerpos técnico-administrativos.
2. Cuando dos gentilicios forman una palabra compuesta, esta se puede escribir separando o no ambos elementos con un guión. Si el compuesto resultante se siente como consolidado, lo escribiremos sin guión. Ejemplos: hispanoárabe, francocanadiense. Si el compuesto no es sentido como unidad, puede escribirse con guión. Ejemplos: luso- japonés, hispano-ruso.
b) El guión sirve para dividir una palabra al final de renglón cuando no cabe en él completa. Para realizar esta división hay que tener en cuenta las consideraciones que se detallan más adelante.
1. Cuando la palabra contenga una h intercalada precedida de consonante, el guión se colocará siempre delante de la h, tratándola como principio de sílaba. Ejemplos: des - hidratar, in - humano.
2. Los dígrafos ll, rr y ch no se pueden dividir con guión, por representar cada uno de ellos un único fonema. Ejemplos: ca - llar, ca - rro, le - chuga.
3. Cuando en una palabra aparecen dos consonantes seguidas, generalmente la primera pertenece a la sílaba anterior y la segunda a la sílaba siguientes . Ejemplos: in - ten - tar, es - pal - da, es - to, suc - ción.
Los grupos consonánticos formados por una consonante seguida de l o r, como bl, cl, fl, gl, kl, pl, br, cr, dr, fr, gr, kr, pr, tr, no pueden separarse y siempre inician sílaba. Ejemplos: ha - blar, su - primir, de - trás, re - cla-mar, in -fla-mar .
4. Cuando tres consonantes van seguidas en una palabra, se reparten entre las dos sílabas respetando la inseparabilidad de los siguientes grupos consonánticos: los constituidos por una consonante más l o r vistos en el párrafo anterior, que siempre encabezan sílaba, y los grupos st, Is, ns, rs, ds, que siempre cierran la sílaba. Ejemplos: ham - bre, am - plio, in -flar, en - trar, des - gracia, ist - mo, sols - ticio, cons - tante, abs - tenerse, supers - tición.
5. Cuando son cuatro las consonantes consecutivas en una palabra, las dos primeras forman parte de la primera sílaba y las dos restantes de la segunda. Ejemplos: cons - treñir, abs - tracto, ads - cripción.
6. Es preferible no segmentar las palabras de otras lenguas al final de renglón, a no ser que se conozcan las reglas vigentes en los idiomas respectivos.
7. Las siglas y acrónimos, así como las abreviaturas, no pueden dividirse al final de renglón. Así sucede, por ejemplo, con UNESCO. Se admite la división en los acrónimos que han pasado a incorporarse al léxico general, escritos, en consecuencia, con minúscula. Ejemplos: lá - ser, ra - dar
c) Cuando se antepone el guión a una parte de una palabra (sílaba, morfema, etc.), indica que esta va en posición final. Ejemplos: -iIlo, -idad, -ar. Cuando se pospone el guion a esa misma parte, indica que esta va en posición inicial. Ejemplos: post-, re-, cant-. Si el elemento en cuestión se coloca entre guiones, se entiende que está en interior de palabra. Ejemplo:-ec-, -in-, -bl-.
d) El guión también se emplea para unir palabras con un valor de enlace similar al de una preposición o una conjunción. Ejemplos: la línea de metro Ventas-Cuatro Caminos, el partido Atlas-Chivas, una relación amor-odio.

Barra
La barra ( / ) tiene los siguientes usos (en informática también se utiliza la barra invertida [ \ ], es una variación permitida solo para esta materia y no tiene significado lingüístico):
a) Sirve para señalar el límite de los versos en los textos poéticos reproducidos en línea seguida. En este caso se escribe entre espacios. Por ejemplo:
¡Y si después de tantas palabras, / no sobrevive la palabra! / ¡Si después de las alas de los pájaros, / no sobrevive el pájaro parado! / ¡Más valdría, en verdad, / que se lo coman todo y acabemos!
(César Vallejo: Poemas póstumos)

b) En algunas transcripciones de textos, se utiliza para señalar el cambio de línea en el original y también se escribe entre espacios. Por ejemplo:
QVINTA / PARTE DE FLOR / DE ROMANCES NVE / uos, nu[nlca hasta agora impressos: / Llamado Ramillete de Flores: / De muchos, graues, y diuer / sos Autores. Recopi / lados no co[n] po / co traba / jo
e) Tiene valor preposicional en expresiones como 120 km/h, Real Decreto Legislativo 1/2000 de 24 de marzo, salario bruto 220 000 pts./mes. En este uso se escribe sin separación alguna de los signos gráficos que une.
d) Colocada entre dos palabras o entre una palabra y un morfema, puede indicar también la existencia de dos o más opciones posibles . En este caso no se escribe entre espacios. Ejemplos:
El/los día/s detallado/s.
Es el tipo de bromas ylo mentiras piadosas que Inés no soportaba.
(Alfredo Bryce Echenique: La vida exagerada de Martín Romaña)
e) Forma parte de abreviaturas como c/ (por calle), clc (por cuenta corriente), etc.

Apóstrofo
El apóstrofo ( ' ) no tiene prácticamente vigencia en el español actual.
Este signo solía emplearse antiguamente, sobre todo en poesía, para indicar la omisión o elisión de una vocal. Ejemplos: d´aquel, por de aquel; l'aspereza, por la aspereza; qu´es, por que es. Este uso se conserva en algunas ediciones actuales de obras antiguas.
Los nombres propios de otras lenguas que incluyen apóstrofo, lo conservan. Ejemplos: O'Donnell, D'Ors, etc.

Signo de párrafo
El signo de párrafo (§) se emplea, seguido de un número, para indicar divisiones internas dentro de los capítulos. Ejemplos: § 12, § 23.
También se utiliza en las remisiones y citas de estas mismas divisiones. Por ejemplo: Véase § 16.

Asterisco
El asterisco (*) es un signo en forma de estrella que se utiliza con estas funciones:
a) Como signo de llamada de nota al margen o a pie de página dentro de un texto. En este caso se pueden situar uno, dos, tres y hasta cuatro asteriscos en llamadas sucesivas dentro de una misma página. En ocasiones, estos asteriscos se encie- rran entre paréntesis: (*).
b) Se antepone a una palabra o expresión para señalar su incorrección, bien en su uso o bien en su ortografía. Ejemplos: pienso *de que volverá tarde (forma correcta: pienso que volverá tarde); *cocreta (forma correcta: croqueta); *a grosso modo (forma correcta: grosso modo).
e) En Lingüística histórica, antepuesto a una palabra, indica que se trata de un vocablo hipotético, resultado de una reconstrucción. Ejemplos: *bava, *appariculare.
d) El asterisco puede tener también otros valores circunstanciales especificados en un escrito o publicación concretos.

Llaves
Las llaves { } constituyen un signo doble que encierra texto, aunque también se pueden utilizar de forma aislada.
En ambos casos, estos signos se utilizan en cuadros sinópticos y esquemas para agrupar opciones diferentes, establecer clasificaciones, desarrollar lo expresado inmediatamente antes o después, etc.

Bibliografía:Ortografía de la Lengua Española - Real Academia Española, Madrid, España 1999.Diccionario de la Lengua Española - Real Academia Española, 21 edición, Madrid, España 1992.
Si tienes alguna duda en relación a la información aquí presentada, puedes utilizar la
lista de discusión de La Lengua Española., recuerda que es gratuita y están inscritas personas altamente calificadas que pueden ayudarte a resolverlas. Si tienes alguna sugerencia para ampliar o mejorar el tema, por favor envíame un correo y con gusto tomaré tus comentarios.

Géneros literarios

GENEROS LITERARIOS

Géneros literarios son las agrupaciones de obras literarias de una misma especie. Su objeto es establecer cuántas clases de obras literarias hay para facilitar su estudio y conocimiento.
Algunos niegan la existencia de los géneros. Dicen – y con razón -, que no hay géneros puros; que la mayor parte de las obras son auténticas mezclas y no se sabe qué es lo que predomina. Pero esto es tomar el rábano por las hojas. La verdadera intención de los géneros no es hallar especies puras (como en zoología o botánica), sino simplemente ordenar las obras literarias para evitar el caos en que estarían si no se les impusiera algún tipo de clasificación.
Las clasificaciones que se han propuesto a lo largo de los siglos son múltiples y variadas. Bastaría citar por ejemplo las que se han hecho desde Aristóteles y Horacio hasta Brunetiére y Bühler. Nosotros no haremos sin embargo un estudio de las mismas (lo que nos llevaría a desarrollar un tema adicional) sino nos limitaremos a estudiar una sola que nos parece bastante completa y que puede ser útil para nuestros propósitos, su autor es el cubano Manuel Gayol Fernández y su contenido es el que sigue.
Hay en principio tres grandes ramas que agrupan los géneros literarios más conocidos: literatura poética o creadora, oratoria y prosa literaria y didáctica.
A) Literatura poética o creadora: Es la especial manifestación de una depurada sensibilidad artística, con predominio imaginativo.
B) Oratoria: Comprende el arte de hablar en público para convencer y persuadir.
C) Prosa literaria y didáctica: Se refiere a las obras que transmiten enseñanzas y que son bellas por accidente.

LITERATURA CREADORA
Se clasifica en dos grandes grupos fundamentales que son 1) Géneros Poéticos Fundamentales y 2) Géneros Mixtos o Compuestos.

1) GENEROS POÉTICOS FUNDAMENTALES:
Se distinguen sustancialmente por el motivo de inspiración que anima al artista literario, ya se exprese en verso o en prosa. Estos son infinitos en su variedad y aspectos, pero pueden reunirse en tres grupos de motivos básicos:

A) ÉPICA:
La poesía épica se inspira en el mundo exterior, como escenario animado, en que se mueven los héroes, cuyas acciones relata. De ahí que presente un marcado carácter narrativo y descriptivo. Por su etimología, en efecto, épica procede de una voz griega- epos - , que significa, relato, narración poética. En la épica predomina lo objetivo en todos sus aspectos, quedando en un plano secundario la personalidad del poeta. Este género nació y dio sus mejores frutos en épocas primitivas, contando la historia de la infancia de los pueblos. En el género épico podemos advertir estos tres caracteres fundamentales: el predominio del elemento objetivo; lo representativo y lo pictórico como elementos estéticos; y la grandiosidad extraordinaria del ambiente épico. La importancia de la poesía es hoy fundamentalmente histórica. Como género literario resulta inactual. La épica se divide por su importancia en: epopeya, poema épico, canto épico y poemas épicos menores. Por su asunto se divide en: épica religiosa, heroica, burlesca y filosófico-social. Por su origen se divide en: épica culta (en la cual se distinguen dos manifestaciones: la espontánea y la erudita.) y épica popular. Por las épocas históricas se divide en: Épica oriental, clásica greco-latina, medieval y neo-clásica.

B) LIRICA: La poesía lírica traduce vivamente lo emocional. Se inspira, en efecto, en la subjetividad creadora, y expresa las ideas y sentimientos del poeta, sus aspiraciones y anhelos íntimos, su vida interior. Por su etimología, procede del griego lira instrumento musical con que los antiguos griegos acompañaban suavemente sus composiciones en verso destinadas al canto. En este género predomina lo subjetivo en todos los aspectos: lo exterior pasa a un segundo plano para destacar singularmente la personalidad del poeta, sujeto principal(protagonista) del poema lírico, Podríamos decir que es la producción viva e inspirada del espíritu del poeta. Una producción llena de profundo sentimiento, cautivadora, además de ser breve y armónica. Aquí se expresan las ideas y sentimientos del poeta, una pintura de su alma; él es el personaje único, por eso la poesía lírica exige en el poeta libre y lozana fantasía, además de vigorosa sensibilidad.

C) DRAMATICA:
La poesía dramática o teatro nos ofrece sustancialmente un cuadro de la vida humana, mediante la representación de una acción que se manifiesta con todos los caracteres de la realidad. Por su etimología procede del griego drao obrar o ejecutar, y significa acción. Aquí se representa una acción, combinando armónicamente la belleza de lo objetivo(mundo real) con lo subjetivo (mundo interior del espíritu), que se realiza en la escena a la vista del público por los actores. En la dramática, en efecto, lo épico es el elemento objetivo de la acción y de los hechos; y lo lírico, es el elemento subjetivo de las ideas y sentimientos de los personajes, que manifiestan el dialogo y que a su vez refleja la propia individualidad del autor dramático. Tres caracteres fundamentales se destacan en el género dramático: a) combinación armónica de los elementos objetivo-subjetivos, b) representación de la acción y c) cuadro animado de la vida individual. Su tema inagotable es la vida con todo su realismo, con la bondad y la maldad de la eterna sustancia humana. Una obra dramática se distribuye en exposición, nudo y desenlace; la obra se divide interiormente en partes llamadas actos, cuadros y escenas.

2) GENEROS MIXTOS O COMPUESTOS:
En la literatura creadora o poética son géneros mixtos o compuestos: a)la novela y el cuento, b)la sátira, c)la bucólica, d)los poemas didascálicos y e)los poemas alegóricos. Se llaman géneros mixtos por razón del proceso a que obedece su composición, en que combinan elementos objetivos y subjetivos de los géneros poéticos fundamentales. Su rango de belleza – en verso o en prosa – presenta diversos grados, siendo notable en la novela y el cuento, por su más pura nota imaginativa o poética.

a) Novela: combinación épico-dramático-lírica, con marcadas esencias poéticas por su predominio imaginativo. Normalmente extensa, permite al autor un desarrollo más completo en cuanto al argumento y a los personajes. La novela puede ser de diferentes tipos por ejemplo: novela corta(entre el cuento y el relato novelesco), novela de tesis(posición ideológica del autor ante un problema de carácter social), novela gótica(llena de misterio, de terror y de sensualidad), novela histórica(hechos imaginarios ambientados en circunstancias reales y concretas, generalmente aparecen personajes históricos auténticos), novela rosa(época moderna, personajes y ambientes convencionales, narrando vicisitudes de dos enamorados cuyo amor triunfa ante la adversidad).

b) Cuento:
Breve relato en prosa de hechos ficticios(como en la novela), pero con abundancia de libre desarrollo imaginativo. Generalmente narra un solo hecho y sus personajes no son más de tres. Sus características principales son: a) brevedad, b) predominio del elemento imaginativo, c) intención moral y filosófica y d) condición sintética. El cuento presenta hondas raíces populares y se puede decir que fue la primitiva forma fragmentaria de la novela. El cuento puede presentar diferentes tipos como: cuento versificado, cuento en prosa, cuentos populares, cuentos infantiles, modernos o contemporáneos.

c) Sátira: Texto en prosa o en verso que emplea la agudeza bajo la forma de la ironía, la alusión, critica o la burla para mostrar la locura, los vicios, los defectos y la maldad humanas. El término se deriva del latín satura, ‘mezcla’ o ‘plato colmado’, y se relaciona con el adjetivo también latino que significa ‘repleto’. La sátira puede ser seria, jocosa, filosófica o moral.

d) Bucólica: Es la combinación de elementos épicos, líricos y dramáticos con una pintura o representación de la vida en el campo y sus sencillos goces en amoroso contacto con la naturaleza.

e) Poemas didascálicos: En estos poemas se acentúa el didactismo o enseñanza metódica de la verdad, con pérdida de la belleza poética.

f) Poemas alegóricos: En estos poemas se destaca menos el aspecto didáctico, en beneficio de una más pura manifestación de belleza. Una alegoría es una ficción en virtud de la cual una cosa representa o significa otra cosa diferente. Los poemas alegóricos son aquellos que, aunque exteriormente significan una cosa, interiormente significan otra. Los más conocidos son: la fábula que son poemas generalmente de animales y que transmiten enseñanzas morales; y la parábola que es una composición generalmente escrita en prosa, cuyos personajes son seres humanos.

ORATORIA
Comprende el arte de hablar en público para convencer y persuadir. Convencer es lograr con razones la aceptación de una verdad. Persuadir es dominar la voluntad, impulsándola a la realización de algo. La calidad poética abunda en la oratoria. Porque no solo se dirige a la inteligencia, sino también a la voluntad y a la sensibilidad, despertando emociones y afecto, que impulsan a la acción. En este aspecto el orador tiene que emplear todos los recursos de la fantasía y de la creación bella.

A) Oratoria Sagrada: Se propone la exaltación de la fe y la moral de una determinada religión. Comprende dos clases de discursos: las pláticas y los sermones. Las pláticas: consisten en explicaciones o razonamientos metódicos sencillos del predicador entre los fieles. Los sermones: son los verdaderos discursos religiosos con la estructuración y características peculiares del género oratorio

B) Oratoria política: Se refiere a la vida pública y a las funciones del gobierno, tratando de los intereses generales de una nación. Esta se divide en oratoria parlamentaria, que es la que se desenvuelve en el ambiente congresional o parlamento, y en cualquier organismo deliberador del Estado; oratoria popular, que es la que se manifiesta en contacto directo con el pueblo, y se caracteriza por el predominio de la persuasión, por su mayor tono pasional para conquistar y mover a sus oyentes a una acción; oratoria militar que es una forma que trata del orden público y de las guerras, extraordinaria manifestación del poder y de la soberanía del Estado; y oratoria patriótica que es la que esta destinada a avivar la devoción y el amor a los grandes de la patria, rememorando sus sacrificios y sus hechos gloriosos.


C) Oratoria forense: Persigue un fin jurídico, que trata de casos controvertidos ante Jueces y Tribunales, en derechos privados y públicos. Esta comprende los discursos civiles o informes en los que se pronuncian las vistas de los pleitos ante los Jueces y Tribunales y que son fríos y meditados, predominando el convencimiento. Y, los discursos penales o del derecho criminal, en este se debate sobre la honra y la libertad de los acusados procesados, para determinar su culpabilidad y castigo o su inocencia y absolución.

D) Oratoria académica: Trata de asuntos científicos o artísticos en expresiones o disertaciones de muy diverso carácter y finalidad. Se divide en: discursos propiamente académicos, que son los discursos que se pronuncian en las Academias o instituciones y corporaciones de carácter científico o artístico; se caracteriza por el tono doctoral de la expresión. Las conferencias de cátedra, que presentan un más concreto y directo fin didáctico; son los discursos que se proponen la enseñanza, y que admiten variedad de tonos según el lugar o establecimiento docente en que se pronuncian y el carácter del auditorio. Y las conferencias expositivas y de divulgación, que son las que integran el tipo de oratoria académica de forma más variada, libre y personal.


PROSA LITERARIA Y DIDÁCTICA
Se refiere a las distintas producciones que destacan una finalidad accidentalmente bella, por estar subordinada la actividad del escritor a otros propósitos esenciales.

A) Periodismo: Género literario en prosa que se caracteriza por su misión informativa de actualidad, de ahí que los artículos periodísticos tengan peculiares rasgos de rapidez, concisión y claridad. Se publica cada cierto período de tiempo(diario, semanal, quincenal, etc.) Su publicación es continua sobre temas de índole diversa pero siempre de interés general.

B) Ensayo: Es un tipo de composición literaria generalmente breve en prosa literaria, que expone sin rigor sistemático pero con honda madurez y emotividad peculiares, una interpretación personal sobre modalidades libremente seleccionadas de temas científicos, filosóficos o artísticos. En él se funden la profundidad de la monografía, ponderación valorizada de la crítica y la fuerza emocional, creadora y bella de lo subjetivo.

C) Crítica: Esta expresión literaria, hace una ponderación razonada del valor y trascendencia de las obras literarias, destacando sus bellezas y defectos. Analiza todos los elementos de la obra, valorizándola razonadamente para cumplir en el plano de la mayor serenidad y comprensión su alta función depuradora. No se debe confundir con la censura(que solo resalta los defectos sin tomar en cuenta los méritos) ni con la invectiva(cariz apasionado, agresivo y personalista que llega hasta la injuria del autor).


D) Didáctica: Esta forma literaria se emplea para exposición y enseñanza de las verdades científicas. Se peculiariza por su finalidad docente. Existen varias manifestaciones específicas con su distinto rango artístico. Si se utiliza la forma versificada, se le llama poesía didáctica. Se acentúa en el tratado y la producción histórica y disminuye casi hasta desaparecer en la crítica y en el ensayo. El autor de esta forma literaria tiene que tener una sólida base científica, ser un expositor metódico y a la vez un artista de la expresión. El tratado como obra didáctica en prosa de acuerdo con la extensión o intensidad de la materia expuesta comprende tres especies: tratados elementales, tratados magistrales y tratados específicos o monografías. a)Tratados elementales: hacen en forma breve o sintética, la exposición orgánica y sistemática de la doctrina de una ciencia o arte, y trata los puntos básicos y sustanciales de una disciplina científica o artística. b) Tratados magistrales: hacen con la mayor extensión y profundidad la exposición orgánica y sistemática de la doctrina de una ciencia o arte, y son más científicos que didácticos. Y c) Tratados especiales o monografías: Son un tratado especial de tipo superior. Equivale al tratado magistral especializado. Considera con toda extensión y profundidad un aspecto particular o punto determinado de una ciencia o arte. Su enfoque no es panorámico sino concreto y parcial.

E) Epístolas o cartas: Carta formal e instructiva, generalmente destinada a la publicación y escrita en verso. Su contenido es diverso y aborda temas filosóficos o morales. La prosa epistolar integra el género de las cartas conversacionales por escrito con el ausente. La carta, en efecto, es una composición en prosa, que dirigimos a una persona ausente para comunicarle noticias o impresiones, salvando las distancias del ausente. Si esta carta va en verso, le llamamos epístola. Existen cartas literarias y públicas. Las cartas literarias: constituyen manifestaciones de la prosa artística en forma epistolar, como vehículo o modo elocutivo de otros géneros, por ejemplo la novela o de la didáctica. Las cartas públicas: son las que abordan asuntos de interés general, y se escriben para ser publicadas, generalmente en la prensa diaria.

F) Historia: Por su etimología, historia procede de una voz griega que significa inquirir, examinar. La historia, en efecto, examina y estudia los hechos del pasado, haciendo de los mismos una relación verídica, razonada e interesante. Es una obra literaria en prosa, que presenta marcados caracteres didácticos ceñidos a la enseñanza del pasado; la historia solo acepta hechos reales. La historia se divide en: clásica y moderna. La historia clásica: comprende la producción histórica de la antigüedad grecolatina y de épocas posteriores hasta la revolución francesa. Es una historia fantástica o pintoresca, cuyo elemento artístico peculiar consiste en las descripciones, los retratos y las arengas. La historia moderna: comprende la producción histórica posterior al siglo XVIII. La historia moderna no ha de ser obra de arte sino científica. La historia científica tiene su cuna en Alemania. La historia moderna da toda su importancia a la rigurosa investigación del hecho, a su exposición razonada, a su recta interpretación, y hasta a su explicación filosófica. El estilo de la historia moderna es ante todo sobrio y conciso, dotado de sencillez y claridad, y a veces de elevación, con expresión ordenada y metódica, de notación digna, que no admite el acento satírico o burlesco, ni el adorno exagerado o ampuloso.

Composiciones históricas:

Las efemérides: Son relatos de sucesos célebres, correspondientes a cada día y clasificados en orden de fechas.
Los diarios: Son narraciones que se describen por día.
Los anales o fastos: Son relaciones de hechos por orden de años.
Las décadas: Los que registran acontecimientos de diez años.
Las crónicas: Son los escritos que contienen narraciones de sucesos memorables acaecidos en espacio determinado de tiempo.
Las memorias: Son las relaciones de algún hecho importante que dejan las personas que lo presenciaron o que en él tomaron representación.
Las biografías: Son obras sobre la vida y acciones de grande hombres.


BIBLIOGRAFÍA

Gayol Fernández, Manuel: Teoría Literaria, tomo II, La Habana, Editorial Cultural S.A., 1960.

Enciclopedia Microsoft Encarta, 2001.

Muñoz Meany, Enrique: Preceptiva Literaria, 8a Ed. Guatemala, Serviprensa Centroamericana, 1979.

Legorburu Igartua, José: Lengua y Literatura, Español 9, Libro del maestro, Madrid, España, Ediciones S.M., 1979.